¡Quiere Volverme Loco!

Cap. 12 ¿Quién cuida de quién?

Comencé a vestirme con pesadez, no tenia ganas de ir a esa estúpida exposición, ¿por que tenía que ir?, me aleje de todo el mundo hace tres años y aunque recibía esas invitaciones cada cierto tiempo, pies nunca asistía, así estaba bien,  Valery no podía obligarme ... O al menos eso creía, porque a pesar de eso yo estaba arreglandome para salir.

Me tome mi tiempo para cambiarme, pero no podía evitar el nerviosismo, me senté un rato para poder respirar y calmarme.

- ¡Ya! - gritó Valery desde el otro lado de mi puerta - ¿no puedes demorar tanto?

- Ya voy (que fastidiosa, a caso no sé da cuenta que no quiero ir)

- Demoras mucho ... Si no sales voy a entrar

- Dame unos minutos (sabia que esa no era una amenaza, era una advertencia, esa chica era muy capaz de entrar)

Terminé mis ejercicios de respiración pero aun seguia nervioso, las manos me sudaban, las piernas me temblaban, sentia la boca seca y el cuerpo pesado, hacía mucho tiempo que no salía y lo que esta chica me estaba pidiendo era imposible para mi, tenía que hacer algo... ¿Cerrar la puerta?, si me encierro ella no podra sacarme.

- ¿Por qué demoras tanto? - Valery entró molesta  y me vio sentado en la cama, movio si cabeza de un lado a otro - no te vez mal - estiró su mano para que la tomará - ¿Vamos?

- Yo ... - tome su mano y era calida, ¿notaría que mi mano estaba fría?, no me habia percatado que estaba tan helada hasta que toque su mano.

- Vamos sera divertido - me jalo y asi deje todo el peso de mi cuerpo en esa cama.

Tome mis llaves antes de salir y Valery no me soltó ni cuando llegamos a recepción, afortunadamente no había nadie que mal interpretara las cosas, cuándo salimos del edificio vi el auto estacionado, así que sólo caminé y Valery se dejo llevar, abrí la puerta y ella no entraba, solo se quedo parada, así que tuve que hacer señas para que entrará.

- Entra tú - cruzo los brazos - no voy arrugar este vestido deslizandome hasta el fondo.

- Eso no ... (¿era broma?)

- Vamos... apura.

Terminé por entrar primero para evitar discutir con ella, aunque era divertida y ese era un buen inicio, le indiqué al chofer que podíamos partir y así empezo el martirio.

Valery miraba de un lado a otro y me contaba una que otra historia que había pasado en "aquel restaurante", "aquella cafetería", "en esa tienda", "al caminar por esa calle", al parecer muchas cosas le habían sucedido en su corta vida.

- Y fue ahí donde compré el vestido, ¿qué te parece? - me miro en busca de respuesta.

- Bu bu buen lugar - mire para otro lado y ella me golpeó el hombro.

- Eso no - cruzo los brazos - hablaba del vestido.

- Ahhh... Bo bo bonito (no era tan idiota como para decirle que no me gustaban las flores)

- No eres sincero - me miro molesta, me jalo del saco para que me acercara y me pregunto al oido - ¿Cómo se llama tu chofer? (que rara, si hace un momento hablamos de su vestido)

- No sé ( nunca le había preguntado, no pensé que fuera necesario) - Valery se quedo con la boca abierta y una mirada de enojo.

- Buenas señor - dijo con una voz dulce - disculpe... ¿Cómo se llama? - el chofer miro por el retrovisor y le sonrió.

- Mi nombre es Elias, señorita.

- Un gusto Elias ... ¿hace poco que trabajo con Nauzet?

- No señorita, trabajo para el joven hace dos años. - Valery me miro molesta y me dio un golpe en la pierna.