the soles of our shoes are all worn out || l.s

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"¡Mierda, Perrie! ¿¡En qué pensabas!?"

Zayn Malik daba vueltas por la sala de su casa, con las manos en las caderas y el cabello revuelto de pasar tantas veces las manos entre el.

Perrie lo veía ir y venir con expresión cansada.
"Zayn, por enésima vez: no fue mi maldita intención."

"¡Y luego apareciste de la nada, sin avisarme!"

"¡Eres un idiota! Llevas casi un mes sin salir conmigo, ¡tengo paparazzis preguntándome si me has dejado, cada que salgo de la casa!"

Zayn hace memoria. Es verdad: había estado tan concentrado en Liam y el trabajo, que había dejado a Perrie de lado.

"¡Yo no tendría porque estar al pendiente de lo que haces con esta farsa y sin embargo soy la que te ayuda! Y por un maldito error me quieres matar" siguió la chica.

"¡Es que como se te ocurre!" exclamó de nuevo el moreno. "¿Por qué mierda llevaste ese jodido anillo?"

Perrie lo ve más molesta. "Zayn si mi novio real se me propone, la idea es llevar el maldito anillo. ¡Olvide dejarlo en casa! ¿Bien?"

"¿Bien? ¡¿Bien?!" Zayn tiró los brazos al aire. "Perrie, ¿sabes en la que me acabas de meter con mi familia?"

"Oh por el amor de Dios, tu bien sabes que lo que diga tu familia te importa una reverenda mierda," la rubia cruza los brazos sobre el pecho y alza la barbilla para imponerse, "Todo esto es por lo que va decir Liam."

Zayn se vuelve a verla como si estuviera loca pero Perrie no piensa ceder.

Ha dejado que Zayn le grite por la última media hora porque se lo merece, en parte, porque no debió ser tan descuidada.

Pero ya estaba bien, el punto estaba claro.
Que Zayn siguiese echando humo por las orejas significaba solo una cosa en el libro de Perrie y a juzgar por la expresión del moreno, no estaba tan errada.

"Si, Zayn. ¡Y no te atrevas a negarlo otra vez! Ya deja de andarte por las ramas. Te gusta."

"Eso no lo se" objetó Zayn rápidamente, haciendo que Perrie resoplara harta.

"Déjate de estupideces, Malik. No tienes doce años, esto no es la maldita primaria para jugar a odiar a la niña que te gusta. Liam te quiere y tu lo quieres a él, y ninguno de los dos tiene las bolas de hacer el primer movimiento."

Zayn la escucha atentamente porque es la primera vez que realmente la ha visto enojada. Perrie siempre es todo sonrisas y bromas.

Pero ahora mismo la rubia estaba a nada de voltearle la cara de un golpe.

"¡Ya estoy harta de jugar a esto, Zayn! ¡Quiero tener mi vida, quiero poder gritar que estoy comprometida con alguien a quién amo!" dijo, tomando su anillo entre los dedos.

"Puedes irte, lo sabes" murmura Zayn.

Perrie niega con tanta pesadumbre que hasta Zayn se siente culpable.
"No sería capaz de dejarte a tu suerte. Además, te expones a muchas perras convenencieras al hacer esto, Zayn."

El moreno ríe ligeramente. "Perrie, estamos metidos en un lío."

La rubia suspira, tumbándose en un sillón.
"Si fueses sincero con lo que sientes, podríamos estar fuera de el."

Zayn no responde, tiene la mente muy ocupada pensando en formas de aclarar esto y salir bien librados.

"No hay salida, por ahora" se rindió Perrie. "Estamos en el infierno."

Zayn trata de ignorar sus palabras, aferrándose a una pequeña esperanza en que todo se solucionara y no tendrá que enfrentarse a la seriedad de la situación.

Pero cuando la mañana llega y ve a Liam moverse por la oficina con ojos hinchados e irritados, tratando de evitar a su jefe a toda costa, Zayn piensa en las palabras de Perrie.

Esta en el jodido infierno.
Porque ha roto el corazón de Liam y no sabe por donde empezar a repararlo.