the soles of our shoes are all worn out || l.s

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Algo que amo sobre mi, es que soy escurridizo.

Nadie se imaginaria donde estoy ahora.
Si es necesario que se sepa, estoy en un pequeño campamento junto al Kilimanjaro.

Muchos turistas y alpinistas vienen aquí mientras suben el monte, y me pareció un buen lugar para pasar unos cuantos días.

Me ayuda a despejarme la cabeza, a no pensar en ese beso.

Fue algo tonto, e impulsivo. Harry hizo bien en no seguirme.
Realmente no se porque lo hice; supongo que me frustre, no supe que más podía hacer para obtener su atención.

¡Pero es que me molesta tanto que se apegue a las cosas malas!
Se la vive pensando en cuanto lo odia el mundo y su ex marido, mientras esta parado en uno de los lugares mas bonitos en el mundo.

¿Quién hace eso?

Pero, prefiero no adentrarme mucho en esos pensamientos.
Por algo estoy aquí tan lejos, en un desesperado intento de huir de una situación tan tonta como un beso y miradas cómplices a la luz de una fogata.

Lo peor es que ni siquiera huí de eso y yo bien lo se.

Huí de él. Porque me siento, cada vez cayendo más profundo en mi propia curiosidad e interés por ese hombre de vida tan complicada.

¿Que tiene de interesante un hombre con dos hijos y mil complejos, para alguien como yo, tan en paz consigo mismo y el mundo que le rodea?

¿Me habré hartado de estar solo? ¿Mi subconsciente es adicto a lo complicado?

¿Por qué me siento tan atraído hacía su persona?

No tengo una respuesta para ninguna de esas preguntas. Solo estoy seguro de una cosa.

Si no me hubiese ido, no estoy seguro de haber podido salir de ese trance en el que caigo cuando Harry esta cerca.

Y me siento estúpido porque lo conozco de hace dos meses, hemos hablado y convivido pero es algo superficial. No lo conozco realmente.

¿Por qué quiero estar con él entonces?

Inhalo profundamente el aire puro que rodea el lugar.

Soy un desastre total.