A prueba de sables << BTS>> [Ichi X Stumplynn]

Ponte vioh parte 2

El John despues de hablar con el Jose y salir arrancando para no sacarle la chucha y no manchar su camisa, se fue a al gimnasio para preparar algo que tenia planeado para ese día. Estaba mas nervioso que la chucha, pero tenia que hacerlo. Si se demoraba un poco más, el empolvao se podría arrepentir. Iba a faltar a todas sus clases si fueses necesario hasta que le saliera bien la wea. No le había dicho ni al Mauri para que no le ayudara, quería hacerlo todo por si solo.

--Mauri, ¿hay visto al John? -- le preguntó el Jereh mientras jugaba con sus manitos -- nos vimos en la mañana, pero de ahí no lo vi mas.

-- No, esa misma wea te iba a preguntar. Siempre me cuenta cuando se arranca. -- Tomó la manito del Jereh para calmarlo -- Tranqui, ya va a aparecer.

El Jereh le sonrió y se fue a sentar.

(...)

-- Juan, ¡por la chucha! -- le gritó el Samuel cuando encontró solo en la sala en el recreo -- ¡La escarcha no se jala! ¿Qué wea te pasa? ¿Querí morir?

-- Casi, pero no weon.

El Juan tenia la camisa y la cara llena de escarcha pegada. Parecía decora el weon.

-- ¿Qué estay haciendo?

-- Unas cositas. No seai vieja sapa. -- El Juan miró al Samuel entero y se dio cuenta que tenía algo diferente -- ¿y esa cadena de como mil kilates?

El Samuel no le respondió y salió corriendo.

Entraron a clases todos y el Samuel venia ahora con casi el quiosco emtero comprado. ¿Desde cuándo este weon tenía tanta plata?

El John todavía no aparecía y eso tenia al Jereh preocupado porque en la mañana estuvo terrible cortante y pensó que se había mandado alguna caga, pero según el no habia nada malo.

-- Señorito Juan, vaya a laarse la ñata porfavor. -- Le dijo la profe que desde hace unas semanas les estaba haciendo clases y era terrible belica, por algo seguia ahi. Le deciai una wea y te agarraba a balazos de una.

El Juan se paró y se fue pal baño. El Jereh no alcanzó a mirarlo porque el Juan salió rajao.

-- ¿Qué wea este? ¿Está que se caga?

(...)

-- Jose, ¿aonde tay? Las clases ya empezaron -- hablaba por teléfono el Jereh.

-- Voy directo a mi muerte -- le respondió -- Si en la noche no te hablo, anda a buscarme en el patio del Chino -- y cortó.

El Jereh era de los primeros en llegar con el Jose, y como no vino el otro wn, estaba solito en la sala. "Voy a echar la picha".

Mientras iba bajando las escaleras, se encontró con el loco John.

-- H-hola, John -- se puso colorao altoke perro, ni siquiera lo miró.

-- Wena. ¿Me podi acompañar al gimnasio?

-- Eh... ya.

El John lo agarró de la manito y se lo llevó caminando hacia el gimnasio. Al Jereh le sudaba todo. Llegaron al lugar y el John se quedó un momento en silencio.

-- Puta la wea, se me olvidó mi discurso mamón. Ya, no importa, improviso.

El wn se quedó como media hora pensando en cómo decirle al Jereh su propuesta decente, ah.

-- Mira..., yo..., tu me... ¿atraes?

-- ¿Te atraigo?

-- Pucha, no habli que me confundo -- estaba peor que para los talking point -- Ya, eh, pero yo te pegaba porque no me gusta que me atraiga la gente...

-- Chucha, entonces te atraigo caleta poh, si desde kinder me sacai la chucha -- el Jereh no sabía que decir, también sentía algo por el John, pero no sabía si era los mismos sentimientos.

-- ¡Me gustai, ya! Mucho... harto... pienso en ti todo el día -- nadie había visto al John de esta forma -- No sé si tu sientes lo mismo, eh... te he molestado todo estos años, pero...

-- ¿Pero qué?

-- No sé, no pregunti weas.

-- John...

-- Ya... ¿Querí pololear conmigo?

KHE

"¿Le digo que sí o no?", la imagen del Juan pasó por su mente, "¿valdrá la pena seguir esperando a ese gil?".

-- Sí.

-- Mira, si me dices que sí te compro un coyac... ¡¿DIJISTE QUE SÍ?!

-- ¡Sí!

-- ¿Tay seguro?

-- Sí.

-- Si yo fuera tú, me mandaría a la chucha.

-- ¡Dije que sÍ, JOHN POR LA CHUCHA!

-- ¡PUTA EL WN CHORO! -- abrazó al empolvado con fuerza, estaba más feliz que la chucha. El Jereh se dejó hacer nomas, pero no podía decir que no estaba cómodo, porque abrazar al John era como abrazar al doctor simi, era blandito y cálido.

(...)

-- Chao, Sami, nos vemos el Lunes -- se despidió alegremente el Jereh.

-- Chao, Jereh.

-- Oh, ¿hay visto al Juan?

-- Sí, se fue apurado, ni si quiera se despidió.

-- Ah, ya.

Salió de la sala y se fue por los pasillos, pasó por el basurero grande y cachó que habían hartas cartulinas rosadas con brillitos ahí dentro. "Que desperdicio de papel", pensó.

Llegó a la salida y estaba su, ahora, pololo afuera esperándolo.

-- Aw, me esperaste.

-- No, me dio paja irme.

-- 😧.

-- Mentira, wn. Vamos -- le tendió la mano -- yo te dejaré en tu casita, sano y salvo.

Ichi
Hoy me subí a la micro y la puerta me agarró la mochila.
Triste mi vida.
Y después casi me caigo cuando me bajé sksispdkodjsodjd.

Stumplynn
Mi corazón se rompe en mil pedazos.