GRAN GIRA GRAN

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Eran las 5 de la mañana, el Jereh se había comprometido a llamarlos a todos para que despertaran. Todos lo mandaron a la chucha, en especial el John, este tiro su celular por la ventana con una bomba de destrucción.

Al final el Jereh se vistió tranquilito y bajó con todas sus cositas afuera. Llego un auto mientras esperaba, era un uber y adentro venía el Samuel con su maleta rosa.

-- Subete luego poh, tengo que ir a buscar a los otros sanganos -- le dijo el Samuel bajándose sus lentes.

El Jereh metió su maleta atrás y se subió, ahí se dio cuenta que ya estaba el Juanito arriba, estaba raja. Se fueron a buscar a los otros. Llegaron a la casa del Mauri, este los mandó a la chucha y dijo que él se iba cuando el quería. El culiao choro. Pasó lo mismo con el John, al Samuel le dio la wea y encadenó sus camas en el auto para ir a buscar al chino y al Jose.

Llegaron al aeropuerto y se confiaron en el chino, porque era el único que había viajado en avión. Hicieron el check -iny después hicieron la terrible cola para pasar las maletas. Al weón del Samuel le cobraron sobre carga porque se llevaba la casa. Cuando le tocó al John todos se cagaron, pensaron que hasta ahí había llegado el viaje, pero no, ni sonó y eso que llevaba dos maletas.

-- Son de cartón los weones.

Pasaron y, como iban atrasados, tuvieron que pasar altiro a la cosa de los metales. El John iba de los últimos y, de los seis primeros, al único que le sonó fue el Jereh que fue por las chapitas de metal.

-- Señor, dejeme revisarlo

-- Pero si son las chapitas.

-- No, ya. Saquese la ropa.

La pura caga, todas las minas amontonas ahí mirando. El John empezó a tirar balazos al techo porque no lo dejaban pasar.

-- ¿Dejó todos los metales en la cajita?

-- ¿Qué me ve cara de delincuente?

Pasó por la cosita y la wea explotó. Le empezaron a vaciar los bolsillos y sacaron cortauñas, destorinilladores, un sable, un árrbol de navidad, dos tractores, la micro, un tenedor, una antena, un tren, el terminator, una parrilla y una pinzas. Le sacaron todas las weas, pasó y se fue a sentar con los cabros.

-- Igual pasé la pala.

Se quedaron sentados ahí jugando al uno hasta que llamaron su vuelo. Los niños iban terrible emocionados, su primer viaje. Iban sentados así: el Samuel con el John y el Jose, el Mauri con el Chino y el Juan, y el Jereh iba solito. Al lado de el venia el ninja.

-- Oye, ¿no se nos queda algo? --preguntó el Mauri.

Sonó que tiraron una piedra en la ventana, el Samuel miró y estaban las cabras con una bazuca abajo. Los conchesumadres se habían olvidado de las niñas.

-- ¡Arranquen esta wea! -- gritó el Jose. El John se fue donde el piloto y lo hizo despegar al toque.

Iniciaron el viaje y las asafatas empezaron a llevar comida.

-- Buenas tardes, señor -- una saludó al Mauri.

-- Quiero un pastel de choclo.

-- Señor, no tenemos choclo...

-- ¿Les pregunté si tenían?

-- Pero...

-- No, bajenme de esta wea, John, quema el avión.

-- Oye, no seai así -- el Juan se metió en la conversación -- Tení que ser educado. Disculpe, ¿tiene jugo de manzana?

-- Solo de naranja.

A prueba de sables << BTS>> [Ichi X Stumplynn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora