Capitulo 3

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Hace una hora que estoy sentada en frente de mi armario decidiendo que ponerme. Creo que este es un problema que todas las mujeres pasamos en algún punto de nuestras vidas, la indecisión de elegir un conjunto perfecto que nos haga ver y sentir hermosas. En mi caso siempre me resulta un problema porque me gusta vestirme simple, una remera y un jean, short o pollera y por eso siempre Ambar me critica, dice que carezco de sex appeal. Y mientras estoy sentada mirando la ropa pienso en el extraño de ojos azules, me acuerdo de su comentario sobre mi corpiño y de cómo lo deje boquiabierto con lo que le dije y eso me da el valor suficiente para hacer algo que hace tiempo no hacía, elegir un vestido sexy. 

Decido ponerme un conjunto de ropa interior negro ya que el rojo se notaría mucho con el vestido que tengo en la mira, es uno negro con escote corazón y a la altura de la cintura se vuelve más ajustado. Ojo, no tengo un cuerpo 90 60 90 como Ambar, pero me veo bien, de hecho me veo muy bien, acentúa mis curvas, muestra mi pecho sin revelar mucho y se ajusta en mis piernas que gracias a mis clases de spinning están más moldeadas y tonificadas. Miro por Youtube unos tutoriales acerca de cómo hacer peinados ya que mi pelo siempre está en mi contra, no es ni lacio ni tiene rulos, sino que a medida que llega a mi espalda se van formando ondas así que es difícil de manejar. En fin, después de ver muchos peinados opto por un recogido con una trenza que se ata en forma de rodete, dejando solo mi flequillo y un par de mechones libres. Por último, me maquillo un poco más de lo común, delineando mis ojos, agregando rímel a mis pestañas y poniéndome un poco de brillo en los labios. Una vez que termine me miro al espejo y siento que la extraña que me mira no soy yo, sino una persona totalmente diferente. Hace mucho tiempo que no me veía sexy pero en este momento me siento una mujer poderosa con el mundo a mis pies. Si me pusiera a pensar en cómo algo tan superficial como un vestido y un poco de maquillaje hacen que me sienta mejor terminaría enredada en un debate feminista en mi mente y no saldría nunca, así que hago caso omiso de esos pensamientos y salgo de mi departamento pensando en que debería haber traído un abrigo.

A medida que me acerco al bar veo a mi amiga en la esquina esperándome y me doy que ni ella me reconoce, así que una vez que estoy al lado de ella pega un grito de emoción que hace que todo el mundo nos mire y que yo me ponga colorada.

-¡Isa, estas hermosa! ¿Cómo puede ser que escondas ese cuerpo todos los días? Podría matarte en este momento. Las clases de spinning que estuviste haciendo dieron resultados por lo que veo- exclama palmeándome el culo para luego morirse de la risa.

-Ambar, te juro que la próxima vez que hagas eso me doy vuelta y me voy.

-¿Eso le decís a los chicos también?- pregunta provocándome.

-No amiga, a los chicos me los llevo conmigo- le guiño un ojo y tanto ella como yo nos sorprendemos ante mi comentario y reimos.

-Epa, hoy no solo estas vestida como una femme fatal sino que estas en plan de conquista, no conocía esta faceta tuya, ¡me gusta!

-No tenes idea de lo que estas curvas pueden causar- comento poniéndome las manos en la cintura.

-Yo creo que vos tampoco y esta noche ambas lo vamos a averiguar- afirma riéndose mientras entramos al bar.



Hola Lectoras y Lectores!

Hoy subí un capitulo mas cortito pero espero que les guste y, si es así, no olviden votar!

Les dejo en multimedia el vestido que uso Isabella y su peinado

Besos

Besos

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