Hasta Encontrarte

Capitulo 52

En este momento la odiaba con todo mí ser y cuando sonó el teléfono no vi ni quien era pero atendí segura de que era ella y quería que me escuchase lo que tenia para decirle.

-Y ahora ¿qué mierda es lo que queres? ¿Seguirme torturando? Dejame en paz por dios- grito a través del teléfono.

-Isabella, soy yo, soy Cole. Mi amor ¿qué es lo que pasa? ¿Por qué estas así? Es otra vez tu ex, porque si él te puso así te juro que lo mato.

Por supuesto que era mi novio. No le había mandado el mensaje de que había llegado y se había preocupado. Pienso que esto es lo que se siente ser amada por alguien y solo quería que estuviese al lado mío para abrazarme y contenerme.

-Cole, ¿te puedo pedir un favor? Sé que tenes que preparar la cena, pero ¿te molesta venir a casa ahora? Te necesito.

-Si Isa, ya salgo para allá, no te preocupes por la cena, me ayudas a cocinarla lo cual va a ser más entretenido, ya salgo para allá, quédate tranquila- me dice y luego corta la comunicación.

Cinco minutos después me suena el timbre y era él. Había hecho rapidísimo para llegar pienso y en cuanto abro la puerta me tiro a sus brazos.

-Gracias por venir, en verdad necesitaba que me abrazaras.

-No tenes nada que agradecerme, vos sabes que siempre que necesites a este adonis infernalmente sexy voy a venir lo más rápido que pueda, es más, hubiese llegado más rápido pero las chicas se me colgaban y eso me retraso.

Me rio al escuchar semejante estupidez pero sé que lo estaba haciendo para que me sienta mejor lo cual no hace más que reforzar, no solo lo gran persona que es, sino el amor que siento por este hombre.

-Gracias, no sé qué haría sin ese pequeño ego y sutil arrogancia.

-De pequeño no tengo nada- me dice y después agrega. - Isa, ¿qué fue lo que paso?

-Te estaba por escribir el mensaje de que había llego cuando me llamo mi madre diciéndome lo que ella y su tercer esposo iban a ponerse para el casamiento de mi prima este viernes. Inmediatamente cuando escuche que ese individuo iba le dije que no contase conmigo pero me empezó a gritar que me iba a hacer la vida imposible si no aparecía en el casamiento y que me mantuviese alejada de Jonathan porque no iba a permitir que lo seduzca como una puta. Después de que me corto el teléfono rompí en llanto y cuando sonó de vuelta pensé que era ella pero estabas vos del otro lado.

Se notaba que Cole quería matar a alguien y me di cuenta porque ya notaba ciertos detalles que me dejaban ver cuál era su estado de ánimo. Por ejemplo, en este momento sé que está furioso porque tiene la mandíbula apretada y cuando traga lo hace con dificultad.

-La verdad es que no puedo decirte todo lo que opino acerca de tu madre porque es una mujer, lamentablemente es mi suegra y porque le tengo un mínimo de respeto ya que me dio el mejor regalo de la vida que sos vos pero no tenes que hacerle caso a nada de lo que te diga. Ella no va a hacerte la vida imposible porque yo no se lo permitiría y ese hijo de mil puta no va a ni siquiera mirarte porque lo mato al segundo. Esto es lo que vamos a hacer, mañana cuando salimos de trabajar, antes de ir a la cena en la casa de Tommy y Ambar, vamos a ir a que te compres el vestido más alucinante de un diseñador de alta costura y tu hombre se va a comprar un smoking con el que haga suspirar a las mujeres, o bueno, en todo caso hacerlas suspirar más que de costumbre. Vamos a ir a ese casamiento y a mostrarles que sos una mujer hecha y derecha, que no le tenes miedo a nada ni a nadie y que te acompaña un hombre que daría la vida por vos.

No sé qué era lo que había hecho en mi vida para merecerlo. Nadie, salvo mi papa, me había demostrado tanto amor como él. Amarlo era lo mejor que me había pasado en la vida. Agradecí que estuviese conmigo y asentí porque estaba segura que con él al lado mío podía hacer hasta lo impensado.

Me espero mirando tele mientras me duchaba lo cual me vino muy bien para despejarme ya que no iba a dejar que mi madre estropease la cena romántica que había organizado Cole. Me puse uno de mis conjuntos de ropa interior más bonitos que tenía, era negro con encaje y la bombacha era una tanga. Mi culo no estaba muy acostumbrado a usarlas pero valdría la pena una vez que Cole me viera. Arriba me puse un mono de color negro también con unas botas. Cuando termine de peinarme y maquillarme Cole empezó a silbar y a correrme por mi casa tratando de agarrarme para hacerme cosquillas. Me ponía de buen humor el simple hecho de tenerlo cerca. Una vez que terminamos de actuar como adolecentes, agarramos nuestros abrigos y empezamos a caminar hacia su casa y me dio mucha curiosidad saber que era lo que tenía preparado.