Hasta Encontrarte

Capitulo 53

Cuando llegamos a su casa me quede impresionada, era enorme. Tenía tres habitaciones, dos baños, un balcón terraza, un living comedor y cocina que eran mínimo tres veces mi departamento. Dios mío, que cómodo que sería vivir acá y más que nada qué lindo seria tener tanta plata. Mi familia nunca fue pobre pero tampoco podíamos permitirnos ningún lujo. Mi papa era el único que trabajaba mientras mi madre salía por las noches y miraba tele durante el día. Cuando él se iba a trabajar, y mi abuela no podía cuidarme porque vivía lejos y era una mujer grande, una vecina estaba conmigo cuando era chiquita y después, cuando cumplí 8 años me quedaba sola. A pesar de esto disfrute mucho de mi infancia en compañía de mi papa, siempre me llevaba a la plaza, cuando podía a comer afuera hamburguesas con papas fritas, me leía libros, y venía al cine conmigo de vez en cuando. No sé que hubiese sido de mí si no fuese por él, siempre pienso en eso. Se ve que me había quedado colgada en mis pensamientos porque de repente veo que Cole me estaba mirando.

-¿En qué estas pensando?- pregunta acercándose a mí y me abraza.

-Pensaba en lo lindo que es tu departamento, en lo cómodo que debe ser vivir acá y en mi infancia, más que nada en mi papa- digo un poco nostálgica.

-Me encantaría que vengas las veces que quieras, porque, el hecho de que sea grande no implica comodidad para mí sino que hace resaltar más el hecho de que estoy solo. A mí me encanta tu departamento.

-¿En serio? ¿Cuál de sus atributos te gusta más? Que sea un mono ambiente y llegues rápido a todos los cuartos de la casa, que este todo acumulado y casi no haya espacio para caminar o la espectacular vista que tengo a la pared del edificio de enfrente. No estoy muy segura de cual preferís- digo poniendo cara pensativa.

-Veo que estas de mejor humor Isabella, en realidad me gusta porque cada vez que llego siento que estoy en casa o quizás es porque vos estas ahí.

Cuando dice algo tierno o romántico me derrite, no entiendo como lo hace. Nunca fui cursi, de hecho mi sarcasmo muchas veces no me lo permitía, pero desde que lo conocí descubrí nuevas facetas de mi persona, por ejemplo, puedo ser romántica, dulce y hasta a veces celosa. Que puedo dejarme llevar por mis emociones y no tener que racionalizar cada palabra de cada oración. Pensar un poco más en mi misma, en quererme, en no dejar que nadie me haga sentir mal o que no valgo nada. Él me enseño que los sueños se cumplen pero que hay que luchar por ellos y, en lo que fue un excelente maestro es en el sexo. Aprendí que es lo que me gusta, lo que me excita, con lo que me siento cómoda y también como darle placer a mi pareja. Hizo salir a la Isabella osada que estaba oculta con miedo de salir. Es increíble lo que una persona puede mostrarte de tu persona que ni vos misma sabias que existía. Siempre pensé que el amor estaba sobrevaluado y que existía solamente en lo cuentos o películas de Disney pero en estos días aprendí que no es así, que si una espera y no lo busca te encuentra. Me asombro de como en un segundo podes, en nuestro caso sería chocarte, con alguien que cambia tu vida para siempre.

-¿Estás seguro que es por mi? Yo creía que era la vista lo que te atraía- comento y me empiezo a reír.

-Muy seguro, y te digo como me di cuenta, porque, como te dije antes siempre me sentía muy solo cuando llego acá salvo por hoy. En este momento la siento mi hogar- murmura mientras comienza a besarme.

Dios, si empezábamos así íbamos a terminar en la cama y quería saber que era lo que había planeado para la cena, así que tuve que luchar en contra de cada centímetro de mi cuerpo para apartarme y lo mire.

-Cole Waylen te amo y quiero hacerte el amor ya mismo pero jugaste con mi curiosidad con respecto a la cena y eso es imperdonable. Quiero ver que tenes preparado- le explico mientras pongo mi cara de puchero compradora a la cual él no puede resistirse.

Resopla haciéndose el ofendido pero enseguida se acerca y muerde mis labios que siguen haciendo puchero.

-Bueno, vamos a tener que preparar la cena juntos aunque la idea era que vos no hicieras nada, pero antes dejarme darte un tour por la casa.