Soulmate [CERRADO] [Personaje x Lectora]

Kise Ryouta x Chubby!Lector [KNB]

[Cada vez que te miras en el espejo, puedes ver el de tu alma gemela. Cuando se encuentren, dejaras de hacerlo.] 

No quería verse en el espejo, porque vería el de su alma gemela. Es así desde los trece años, aproximadamente. Y por mas que ama verlo y ver lo mucho que cambió con los años, todavía tenía la imagen mental de ella a los trece. Ahora a los diecisiete, no quiere saber cómo se ve realmente. 

(T/n) es rellenita, desde una edad muy joven. 

Bajo la mirada, mirando sus muslos. Son grandes a comparación de la de otras chicas, y sus jeans siempre se gasta con rapidez en esa zona. Continuó con sus manos, salteando el vientre. De todas formas ya sabe el aspecto de este con solo verlo una vez. Sus manos no son pequeñas, ni los dedos son delgados y finos. 

Muñecas anchas, y lo mismo con los brazos. 

Tenía más mejillas que rostro. 

Rostro redondeado..

Negó con la cabeza, dejando de pensar en esas cosas. Más de una sola vez, su demonio interior hacia comentarios horribles hacia su figura, comentarios que le hicieron alguna vez compañeros o personas cercanas, de forma inconsciente y consciente. Todos lidiamos con nuestros demonios, pero a veces..

Es demasiado agotador. 

(T/n) se desperezó igual que un gato, bostezando y estirando tanto los brazos como las piernas. Llevaba ya un buen tiempo sentada delante del escritorio, terminando tareas y estudiando. Si giraba la cabeza, podía ver a su cama, llamándola silenciosamente. Quería tirarse a dormir, envolverse con las sábanas, abrazar su almohada y despertarse varias horas después. 

Pero tiene que terminar esto. 

Bueno, un descanso no le haría mal, ¿no?

Se tiró casi de cabeza, suspirando feliz. Antes de poder llegar a acurrucarse, su celular comenzó a vibrar. No necesito mirar quien era, porque se da una idea. 

—¡(T/n)-chan! ¿Me acompañas a un lugar? ¡Por favor! —era su mejor amiga, Yukari. De fondo la podía oír yendo de un lado a otro, posiblemente dentro de su habitación. 

—¿Ahora? Acabo de acostarme~~ —se quejo por lo bajo, abrazando su almohada. 

—..Te acompañare a la convención esa de anime que tanto quieres ir pero nadie te acompaña. 

Se produjo un corto silencio, antes de que (T/n) se levantará a toda prisa, buscando ropa que ponerse. 

—¿A dónde vamos? 

Miro a Yuriko, con los ojos entrecerrados. 

—Deberías haber dicho de primera mano que me llevarías a ver chicos guapos sudando y jugando basquet. —suspiró, acomodándose mejor en su asiento. —Olvide mi camara. 

Su amiga rió con ganas, y de repente la vio señalar a un jugador. —Es el, mi alma gemela. Mitsuhiro Hayakawa~ —(T/n) juraba ver corazones en sus ojos. —¿Verdad que es adorable? 

Lo miró, parecía un cachorro con demasiada energía. Y por los pocos minutos que llevaban viendo el juego, había gritado un par de veces, en un idioma que ella no lograba entender. ¿eso era japonés?