Los gemelos Channy

107. Insistir al hipócrita

Lía

Me titila un ojo...

¿Por qué...?

Mis pulmones se llenan de aire para poder gritar.

—¡¡¿Por qué estás en mi cama?!! —levanto los brazos furiosa.

—Porque el sillón estaba incómodo —opina Dan y siento que voy a matarlo.

Hasta se abraza a las sábanas ¡Esto es el colmo!

—Adelantate, yo dormiré un poquitito más —agrega al yo quedarme callada observándolo e irradiando ira.

—¡¿Qué mentiras le has dicho a mi madre?! —insisto —¡Vete, fuera de mi casa, ahora!

—¡Estoy durmiendo! —me tira el almohadón en la cabeza.

—¡¿Y cómo es qué me respondes entonces?! —exclamo molesta pero burlándome.

Se acomoda en el colchón, apoya su cabeza sobre su mano mientras se mantiene recostado y sonríe con satisfacción para responder.

—Telepatía.

—¡No digas estupideces y dime por qué estás aquí! —al menos exijo respuestas.

Muevo su dedo haciéndome una señal.

—Ven aquí y te digo —me guiña el ojo.

—Sigue soñando —ruedo los míos.

—Si es así... —se voltea y vuelve a acomodarse en la misma posición para dormir —gracias, es lo que esperaba que dijeras.

¡Ah, me engañó!

—¡¡Qué te salgas, vete!! —vuelvo a insistir gritando.

—Eso no me dijiste hace un rato... —se ríe —por mi parte seguiré soñando, bye.

Lo mato, juro que lo mato. ¿Cómo una persona puede ser tan diferente a lo que uno piensa? Obvio, siendo un hipócrita.