Los gemelos Channy

168. Heinz, el observador

Heinz

La gemela que ha molestado a Lía durante varias clases, entra al gimnasio corriendo y llorando, acercándose a su hermana. Le dice unas cuantas palabras y esta le pega un cachetazo. Tienen una corta conversación, ya que Dan las interrumpe al estar junto al lado, luego él camina en dirección hacia una chica y...

El aburrimiento me debe estar matando para andar viendo lo que hacen. Tomo un sorbo del vaso de jugo y de repente tironean dos veces de mi traje. Giro la vista y una sonrisa se forma en mi rostro.

—Noah ¿Dónde estabas? Él mundo es aburrido sin ti.

El pequeño rubio está sonrojado y abré la boca lentamente.

—Prin... ¿Príncipe? —habla de mi disfraz.

—¿Qué? —me toco el cabello —¿Me queda mal?

Niega con la cabeza repetidas veces y hace una gran sonrisa.

—Es muy bonito, te personifica a la perfección.

Me río.

—Ni tanto.

—Yo creo que sí —baja la vista tímido. Luego la levanta —¿Te gusta mi disfraz?

Me quedo tildado mirándolo.

—¿Qué supone que eres? —digo confundido.

—¡Ah! —se sorprende —se me cayó —se pone una aureola en la cabeza y sonríe feliz —¡Soy un angelito! —levanta las manos contento.

—Okey, me morí de ternura —lo abrazo y le doy muchos besos.

—¡Ay, que vergüenza! —expresa sonrojado —¡Nos van a ver!

—Pues no me importa —lo beso y me corresponde.

Junto mis labios una y otra vez con mi pequeño rubio, mientras él se agarra fuerte de mi traje. Segundos después se oye un grito y nos giramos a ver que pasa.

—¡Lía! —grita Noah.

—¿Cuñada? —expreso confundido.

¿Por qué rayos Lía le ha pegado con un bate a Dan?

Él se levanta del suelo adolorido pero sonriente y ella lo observa con tremendo odio.

¿Pero qué acaba de ocurrir?

Eso pasa por dejar de ser un observador.