Capítulo 50

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No digo nada más y me marcho con mi abuelo.

Al llegar a la casa de Marie y ver la reacción de felicidad de su abuela al percatarse de la presencia de mi acompañante no puedo evitar sonreír, incluso eso me ayuda un poco tranquilizarme y respirar, pero eso solo dura unos pocos minutos.

Entramos a la casa, papá James y la señora Margaret conversan dirigiéndose hacia el jardín, antes de irse me indican que mi amiga está arriba y subo para saludarla.

Abre la puerta para dejarme pasar y tan solo al ver su cara la conversación con Maddie aparece en mi mente por lo que comienzo a sentirme estresado de nuevo.

Me siento en el escritorio luego de saludarla, ella busca otra silla y se acomoda junto a mí, está hablando pero no la escucho, mi mente se encuentra enfrascada en el asunto de las chicas, no sé qué hacer. ¿Hablo primero con Angeline o con Marie?

—Oye, Sam, ¿todo bien? —consigo salir de mis pensamientos y asiento.

—Creo que estoy algo preocupado o ansioso por lo del torneo y bueno, las ideas en mi mente no paran —sonríe.

—Vamos, Sam, sé que te irá genial, no debes preocuparte.

Vuelvo a asentir, suspiro, y esa señal es suficiente para que la chica se de cuenta de que no estoy siendo completamente sincero.

—Pasa algo más, ¿cierto? —niego con la cabeza pero ella me mira seria.

—A mí no me puedes ocultar nada, lo sabes —suspiro.

—Marie, ¿por qué te fuiste?

Me quedo mirándola ante su completo silencio, puedo notar algo de nerviosismo en su mirada, pero este es velozmente reemplazado por una pequeña sonrisa, va a decir algo, entonces mi celular suena interrumpiéndonos, lo tomo para ver de quién se trata encontrándome con un mensaje de Angeline.

Angeline: ¿Cuál crees que se me ve mejor?

Ha adjuntado dos fotos con atuendos diferentes, lo menos que quiero ahora es ayudarla a elegir ropa, pero como sé que va a seguir insistiendo hasta que le diga selecciono uno y respondo, me llega otro mensaje.

Angeline: Eres el mejor, creo que ese es el que más me gusta...¿ y de estos cuál te gusta más?

Envía otras dos fotos, esta vez usando trajes de baño, niego con la cabeza y río.

Yo: Vamos mal si del acuerdo se trata.

Su respuesta no se hace esperar.

Angeline: Ja, ja, ja, la fiesta va a ser en la piscina y de verdad necesitaba una opinión masculina, ¿quién mejor para ayudarme que mi mejor amigo?

Yo: De acuerdo, ambos me gustan, la verdad no sé mucho de ropa de chicas, supongo que cualquiera está bien para mí.

Angeline: No, necesito una respuesta concreta, a ver, ¿cuál crees que se me ve más sexy?

Suspiro, de nuevo sé que debo darle una respuesta o va a continuar molestando.

Yo: Ja, ja, ja, ambos, ya te dije que no soy bueno en estas cosas, es más, creo que ningún chico. Me tengo que ir, nos vemos en tu casa.

Guardo el celular, vuelvo a concentrarme en Marie.

—Listo, podemos seguir con la conversación —asiente.

—Me fui porque mis padres querían, y pues, sabes que a donde ellos vayan debemos ir nosotros —se encoge de hombros —ahora, si tu pregunta es más bien si estaba feliz de irme debo responder que sí, de hecho lo de mis padres me pareció una excelente noticia, llegó justo cuando más lo necesitaba —suspira, niega con la cabeza —vamos, Sam, todo eso ya pasó, ¿para qué recordarlo ahora?

¿Mad o Madison?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora