Estaba terminando mi desayuno a las 12:30p.m debido a que al volver a mi casa, luego de dejar a Maddie mis amigos me secuestraron para ir a una fiesta. La noche fue muy divertida pero al despertar en la mañana me dolía de forma terrible la cabeza.
Me tomé un café enorme y dos pastillas para la jaqueca, mi hermana salió con unos amigos y estoy por alistarme para ir a buscar a Maddie cuando me llega un mensaje de Angeline junto a una foto.
Angeline: Tengo secuestrada a tu novia, ya sabes, salida de chicas.
En la foto sale Maddie probándose ropa junto a las demás amigas de Angeline.
Yo: Ya veo, pásenlo bien entonces.
Se pone en línea cuando ve mi mensaje.
Angeline: Eso haremos, querido. Por cierto, ¿cuándo pensabas decirme que Mad y tú son novios? Anoche en la fiesta no mencionaste nada.
Yo: Se lo pedí ayer durante clases, le comenté algo a los chicos pero olvidé decírtelo a ti, todo cambió mucho desde el jueves en la fiesta.
Angeline: ¿A qué te refieres con cambiar?
Yo: Hablamos luego, tengo un dolor de cabeza terrible que no se me quita con nada y prefiero hablar de eso en persona, pero igual te lo diré, no te preocupes, siempre seremos amigos.
Angeline: ¿Los mejores?
Yo: ¡Claro!, pásenlo bien.
Terminando de responderle llega un mensaje del grupo que tengo con los chicos, quieren que vaya a jugar tenis con ellos pero les digo que no, en estos momentos solo quiero recuperarme de la salida de anoche y hablar con Maddie, así que le marco.
—Sam, ahorita estoy un poco ocupada...
—Lo sé, Angeline me envió una foto, por cierto, me gusta ese vestido, te queda hermoso.
—Deja de coquetear —se ríe —ya lo compré, creo que será perfecto para un día de playa contigo.
—Oh, ¿entonces lo compraste por mí?
—Tal vez.
El tono de su voz me indica que tiene una mirada pícara y de solo imaginármela sonrío, cuando la conocí era tan tímida que se sonrojaba por tan solo un cumplido, pero ahora coquetea conmigo completamente relajada y eso me gusta.
—Voy a arreglarme y te paso buscando por la tienda, ¿te acuerdas de nuestra salida, verdad?
—¡Obvio!, y también quiero verte, pero ahora tendrás que venir como a las dos porque todavía estoy comprando, no estoy acostumbrada pero esto me gusta.
—Bien, a las dos entonces, diviértete Maddie, te quiero.
—También te quiero.
Subo aburrido a mi cuarto para tomar una ducha, al salir tengo un mensaje de mi hermana en el que me informa que debemos vernos con papá en el restaurante a las ocho, le respondo que está bien y continúo arreglándome.
Llego a la tienda donde están las chicas, la primera persona a la que veo es Angeline, ella me saluda dándome un abrazo y nos sentamos en un sofá que hay allí para esperar a que las chicas terminen de probarse ropa.
—¿Ya terminaste con tus compras?
—Sí, tengo como cuatro bolsas llenas —se ríe —aprovechando que estás aquí ¿crees que podamos hablar?
Me quedo observándola sin ánimos pero al final termino cediendo y le cuento todo, cortesía de sus pucheros llenos de manipulación.
—Resumiendo, duraste tres semanas con Hailey, ¿y el jueves luego de besar a Mad te diste cuenta de que la quieres a ella? —su expresión me dice que cree que estoy loco.
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¿Mad o Madison?
Teen FictionPorque no importa equivocarse, es parte de crecer, lo realmente necesario es aprender a levantarnos y continuar cuando eso suceda. Charles Chaplin dijo "La vida es una obra de teatro que no permite ensayos; por eso canta, ríe, baila llora y vive int...