Exatlove (Hijo De Octagón)

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—nunca lo aguante y no quiero llorar— susurra presionandome con fuerza, entiendo ese sentimiento te hace sentir débil, tonto e inútil pero debes llorar o te destruirá con más fuerza.

—hazlo, ahora sólo yo estoy aquí y jamás le diré a nadie nada de ti— recargo mi cabeza en su cuello y él sobre el mio, siento sus lágrimas calientes en mi ropa, le quite la mascara por lo que acaricio su cabello para que sepa que nunca lo voy a dejar.

Después de un rato se calmó y me dijo que quería dormir.

—descansa— estire mi mano para que la tomara y así lo hizo, le sonreí —te amo.

—yo a ti— suspire enamorada. Lo solté.

...

—buenos días— Carlos dio leves toques a la puerta, lo vi de pie con una enfermera a su lado —hoy regresamos. Aunque _________ debes tomar sueros orales, pero fuera de eso ya estas bien— asentí.

—ah y Octagón, te vamos a poner la esa cosa de Zoraida por tu desgarre— la enfermera se lo puso. Me empecé a reír al verlo de pie.

—¿qué?

—te pareces a Zoraida. ¡Zoraido!— me burle hasta no poder más.

En en camino no podía evitar reír levemente al ver su pie.
Cuando estamos por bajar, paso su brazo por mis hombros y lo ayudo a bajar.

—¿me prestas tus muletas?— se recarga en la camioneta y me da las muletas, me las pongo y empiezo a caminar, es muy difícil pero lo empiezo a dominar y no pongo los pies en el suelo por lo que me voy de narices a este.  Octagón ríe a carcajadas junto con Carlos, el camarógrafo y el conductor del auto.

—ven— Carlos me da la mano y me ayuda a levantarme.  Le devuelvo las muletas a Octagón.

—bueno, mejorense, tengo que irme— nos da la mano y sube al auto.

Llego y me llevo la sorpresa de que perdimos la fortaleza, me abrazan mis compañeros, preguntan como estaba y les contesto.

Nos dejaron descansar un día y al otro voy al juego con una playera negra con el slogan de mi canal, total no voy a jugar.

El juego de hoy es por comunicación, ganan famosos y Octa habla de nuevo de su hija pero miente diciendo que era hija de su prima, algo muy conmovedor, siento ganas de llorar como ayer pero me aguanto y lo miro para darle seguridad.  Me voy al campamento y me pongo a escuchar lo que hablan mía compañeros.

En la noche vamos al juego de la gallinita ciega, gana Anto a Dani y luego juega contra mi, adivinen quien ganó. Sí Yo.

Todo mi equipo y yo fuimos a comer, estoy más que feliz.