Punto de vista Vegetta777
-Nunca haberme dedicado a youtube –Termino de decirme Willy. No sabía por que había dicho eso, si Guillermo nunca hubiera comenzado en youtube nunca lo hubiera conocido y no se como sería mi vida sin el. Gracias a el yo comencé a grabar vídeos, ya que me molaba mucho cada cosa que grababa ese chaval- Perdón, no quería decir eso es solo que aveces me estreso de tanto tiempo que paso dedicándome a youtube.
-Esta bien, te entiendo. Tienes dos canales en youtube y en los dos casi dos millones –Pensaba en el tiempo que pasaba Willy grabando, editando y subiendo vídeos, realmente yo no podría con dos canales si los tuviera..
-Si, lo sé.. –Dijo dando un largo suspiro.
-Me preocupas aveces, ¿sabes? –Tomo mi mejilla con delicadeza y intento levantarse un poco para darme un beso.
-Mejor cambiemos de tema, no quiero que te preocupes por mi ahora–Lo mejor era no hablar sobre ese tema, tampoco quería que el estuviera triste así que comencé a cantar una pequeña canción mientras acariciaba un poco el cabello de Willy- hay que cuidar muy bien el pelito de Willy, para que tenga un lindo pelo como el de Vegetta –Guillermo solo reía mientras cantaba, se que solo decía puras tonterías pero lo hacía para que Guillermo riera, me encanta su sonrisa..
-Vegetta por favor, todos saben que mi pelo es muy guay, así que no me toques las narices.
-Buah chaval, buah chaval.. ¿estas diciendo que mi pelo no mola?
-No.
-Vale, vale.. –Hice a un lado a Guillermo para así alejarme un poco de el aparentando estar enojado. Guillermo se quedo mirándome y luego se lanzo hacia mi tirándome al suelo –Me volvió a besar jugando con mi lengua mientras yo le seguía, Guillermo se quedo mirándome y yo igual, de un momento al otro ya lo tenía delante de mi besándome, mi cuerpo fue impulsado a abrazarle y acercarle un poco más a mí. Mis manos recorrieron lentamente su espalda y opservababa que Willy me correspondía de la misma forma energético y apacional. Cuando el aire nos hiso falta, alejamos lentamente nuestras bocas, su mirada estaba fija en la mía y su respiración ligeramente agitada.
-Guillermo –susurre comenzando a acariciar su rostro. Willy me tomo de las manos sin decir nada y me guio a su habitación, en donde una vez dentro cerró la puerta y entre besos nos fuimos acercando a la cama. Al chocar contra la cama sentí como el cuerpo de Willy estaba sobre mí, mis manos nuevamente fueron a su espalda acariciándola lentamente, Willy seguía besándome y sus besos fueron bajando a mi cuello pero antes de que siguiera le detuve alzando su rostro para que volteara a verme.
-Guillermo nosotros somos.. ¿pareja? –pregunte ya que sinceramente tenía esa duda en mi cabeza.
-Tu que crees señor Vegetta.. –Observe como Willy sonreía y yo solamente le despeine un poco el cabello.-Calla pringao tenia esa duda –Me sonroje un poco al notar su sonrisa de burla y aproveche que Willy estaba distraído entre risas para colocarme sobre su cuerpo. Willy al notar esto detuvo su risa, lo observe por unos momentos hasta inclinarme a besar sus labios, fue un beso rápido ya que mis besos bajaron a su cuello en donde comencé a besar un poco impaciente. Escuche pequeños suspiros que daba el y eso provocaba que quisiera escucharlo más, es por eso que mis manos impacientes se colaron bajo su camisa en donde sentía su suave piel, mientras subía mis manos. Mas por su cuerpo provocaba que su camisa se subiera. Pude observar su torso ya desnudo ya que la camisa estaba hasta sus hombros, la cara de Willy estaba algo sonrojada y al mirar sus ojos entendí que tenía permiso para continuar. Termine de quitarle la camisa y la arroje por algún lado de la habitación, mis besos fueron por su pecho en donde mi boca atrapo una de sus tetillas en donde comencé a lamber para estimular un poco, mis manos pasaron a tomar sus rodillas para separarlas y colocarme entre sus piernas, una vez que Willy me dejo colocarme allí mis manos bajaron a sus muslos para apretarlos un poco y cada vez que bajaba mis manos Willy trataba de cerrar sus piernas pero yo al estar entre ellas no se lo permitía. Mis manos llegaron a sus glúteos en donde los presione fuerte, fue ahí en donde escuche el primer gemido de Willy, mi mirada fue hasta su rostro y ahí note mas su sonrojo y una mirada que no podía explicar, aun que para ser sincero eso fue lo que más me provoco, le quería escuchar otra vez gemir y no solo eso si no también gimiera mi nombre en alto. No sabía, hacia mal en pensar así aun que no podía controlarlo, mi boca fue a atrapar su otra tetilla en donde succione y mordí ligeramente esta, Willy había cerrado sus ojos y levantado un poco su rostro dejando escapar otro gemido mas, sonreí al escucharle aunque no estaba satisfecho, quería escucharlo mas así que fui besando su torso hasta su entrepierna en donde ya notaba su erección, lamí mis labios y con mi boca fui bajando la cremallera de su pantalón, una vez que termine de bajarla completamente, baje su pantalón y el aprovecho para bajar los míos también, volví a mirar a Guillermo fijamente y no tarde en acercarme a el comenzar a besarle metiendo mi lengua en su boca. Al separarnos Willy con timidez agarro el borde de mi camiseta y termino por quitármela, solo sonreí y nuevamente baje para poder lamer su miembro sobre la telilla. Willy comenzaba a gemir cada vez que rosaba mi lengua con su miembro y cada vez que lo hacía provocaba que me excitara un poco más de lo normal, impaciente comencé a bajar un poco su bóxer, lo deje a medias y volví a subir para besarlo nuevamente, él me dio un beso y se separo.
-Cabrón –fue lo único que dijo para volver a besarme, no evite reír entre los besos.
Él comenzó a besar con dulzura mi cuello, succionando y dejando pequeñas marcas en él, suspiré su nombre y él soltó una pequeña risita haciendo que me estremezca al sentir su respiración más fuerte en mi cuello. Bajo por mi torso depositando pequeños besos por el hasta que llego al elástico de mi ropa interior, comenzó a jugar con este, me mordí el labio intentando evitar algún gemido al sentir el contacto de su piel con mis genitales aunque sea por encima de aquella tela que no cubría demasiado en ese momento. Me incline un poco hacía él, hice que se sentara encima de mi falta y comencé a besarle sus hombros, él hecho la cabeza hacia atrás dándome mayor lugar para seguir besando, me acerque a su rostro y comencé a besarlo. Cuando el menos se dio cuenta había metido mi mano por adentro de su ropa interior y había comenzado a masturbarlo, él me mordió el labio inferior y luego se separo un poco de mi mientras gemía, lo miraba disfrutar, sonreía al ver sus expresiones de excitación y él se había dado cuenta de eso así que ruborizado oculto su rostro en mi cuello avergonzado y con la respiración agitada. Lo escuchaba gemir mi nombre y eso me hacia hacerlo con más velocidad y potencia.
-Ve…Samu… -dijo con la voz entre gemidos-
Willy –dije igual que él y busque su rostro para besarle.
-Entra –me ordenó; sinceramente no creía que él me pidiera eso, creí que iba a ser yo o quizá ninguno, no lo sé.
Hice que se parara y él me quito mi ropa interior y yo hice lo mismo con la ella, me coloqué detrás de él y le di un par de besos en el hombro.
-¿Estás seguro Willy? –me animé a preguntarle.
-Te amo –fue la única respuesta que tuve parte de él para darme a entender que estaba seguro.
Empecé a entrar en él de forma lenta, él soltó un grito ahogado y me detuve rápido.
-Continua –me pidió después de unos segundos.
Le hice caso, había terminado de entrar en él y me quede quieto por un par de segundos para que se acostumbrara y después no sintiera dolor. Lo abrace por detrás y le di un par de besos en la mejilla e iba bajando hasta los hombros. Comencé con los movimientos suaves, cerré los ojos disfrutando aquel momento mientras que de apoco iba aumentando la velocidad.
La habitación se había llenado de gritos y gemidos de parte de los dos, cuando noté que el dolor de Willy no existía aumente la velocidad. Él me freno e hizo que me sentará en la cama de nuevo y él se sentó sobre mí, hizo que entrará en él y él fue el que marcaba el rito ahora. Era un ritmo fuerte y veloz. Sujete sus glúteos aumentando aun más el ritmo y él dio un leve gemido. Los dos pegamos un grito ahogado cuando llegamos al punto máximo, me quité de él después de haberme corrido dentro de él. Me dio un leve beso en los labios y nos acostamos ambos en la cama de él cubiertos por las sabanas; los dos teníamos aun la respiración agitada, sonreí tras recordar lo que había ocurrido hace pocos minutos, lo miré y él había cerrado los ojos.
-Te amo Guillermo –dije sin pensarlo, lo sentía en el corazón y de eso estaba seguro.
-También te amo Samuel –dijo en leve susurro mientras se acomodaba apoyando su cabeza en mi pecho aun con los ojos cerrados, no dude y lo abrace.
¿Quién se imaginaría esto? Hace pocos minutos había hecho el amor con la persona que de verdad amaba y lo más impresionante es que fue con un hombre. Me sentía feliz y lleno, nunca en la vida hubiera pensado en la situación que estaba ahora y jamás me arrepentiría de todo esto; yo a él lo amaba y eso no tenía duda, él era el hombre de mi vida.
