Falling Down - Capítulo 26

13.2K 851 136
                                    

¿Qué pasó? ¿Dónde estoy? ¿Por qué siento mis ojos tan pesados y mi cuerpo tan relajado? ¿Estoy drogada? Respiré con normalidad sin ningún inconveniente, pero me sentía incapaz de abrir mis ojos todavía.

Agudizando mi sentido de la audición, pude distinguir un constante "bip" cerca de mi oído. Fruncí el ceño e intenté abrir mis ojos de nuevo, pero no pude. Por el contrario, sentí una molestia en mis fosas nasales, tenía algo en ellas. No sabía qué era.

Suspiré y sentí cómo el sueño volvía a consumirme.

~~~

Estaba despierta, con los ojos cerrados, haciendo mi mayor esfuerzo para poder abrirlos. Intenté mover mi brazo derecho y un incesable dolor me invadió desde el hombro hasta el dedo meñique.

El "bip" no dejaba de atormentarme. No sabía dónde estaba ni con quién. Lo último que recordaba eran un par de grandes ojos cafés, mirándome antes de que la sangre los hiciera lucir opacos y sin vida, y luego, una caída en picada.

Tragué. Mi garganta ardía, pero no la sentía seca.

Me relajé, descartando cualquier posibilidad de abrir mis ojos de nuevo y me tiré a los brazos de Morfeo.

~~~

¿Cuánto tiempo ha pasado? Joder. Hice un gran esfuerzo, y luego de un rato, conseguí levantar un poco mi párpado derecho.

Todo era blanco, por lo que pude apreciar. Seguí esforzándome, y unos quince minutos de lucha, dieron como resultado la visión borrosa que percibían mis amigos color verde.

Suspiré y volví a cerrar mis ojos. Esperé unos segundos para abrirlos de nuevo, las imágenes comenzaban a hacerse nítidas y pude empezar a notar en dónde estaba.

En frente de mí había una pared color blanco, con un gran ventanal que daba vista a toda la ciudad. Era de día. Al lado izquierdo de la habitación, había una puerta color blanco que por ahora, se encontraba cerrada.

Miré mi cuerpo y estaba cubierto por una bata blanca con pequeños puntos color azul marino y encima había una sábana color azul cielo. La levanté y pude apreciar una manguera saliendo de mi zona íntima. Fruncí el ceño y seguí el recorrido de la manguera, hasta llegar al final, donde se encontraba una bolsa plástica transparente, con un líquido amarillo. 

Así que esto es una sonda vesical. Mi subconsciente estaba tan despierto como yo.

Mis brazos estaban marcados por los pinchazos que recordaba, pero ahora, tenía pequeñas bandas color piel en algunas partes. Eso, sin contar que habían unos cables transparentes que hacían pasar líquidos desde unas bolsas hasta mi brazo, a través de una aguja que se encontraba bajo mi piel. Al ver mi mano izquierda, tenía un aparato gris aprisionando mi dedo índice.

Giré mejor la cabeza y me encontré con una máquina que conectaba el pequeño aparato de mi dedo con un especie de monitor, el cuál tenía unas líneas raras que se movían, y de allí, provenía el insistente "bip".

Volteé y me encontré con una venda blanca sobre mi hombro derecho. Fruncí el ceño y lentamente, levanté mi mano izquierda y la llevé hasta la bata blanca, para quitarla un poco de encima de mi hombro y así poder ver mejor.

En la venda había un gran punto rojo marcado. Tragué en seco. ¿Qué mierda había pasado? 

Una mujer vestida de blanco entró a la habitación, y al verme despierta, salió de inmediato. En cuestión de unos pocos minutos, un hombre con bata blanca y dos mujeres más vestidas de blanco, entraron a la habitación.

Comenzaron a revisarme y una de las enfermeras me dijo algo que no pude entender. Luego de cambiar algunas cosas, revisar la máquina y hablar en un idioma que desconocí, salieron de la habitación, dejándome sola de nuevo.

Falling DownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora