42

3.1K 176 4
                                    

-Bueno – contestaba Camila maniobrando el celular y las bolsas.

-Camila, amor – le respondía Leonardo del otro lado en su oficina.

-Amor, ¿Qué pasó?

-Solo llamaba para decirte que voy a llegar tarde a la cena con la familia, el trabajo se juntó y al último voy a tener una junta pero voy a tratar de que sea rápido.

-Sí, no te preocupes, yo les diré y te dejo porque tengo miles de bolsas que subir al carro y llevarlas al almacén.

-Ten mucho cuidado en la carretera, ¿no quieres esperarme?

-No te preocupes, yo voy y regreso.

-De acuerdo cuídate mucho y regrésame la llamada cuando ya llegues a la casa.

-Si amor y te amo.

-Yo más.

A lo lejos un carro con vidrios polarizados seguía con la vista a Camila, lo que hacía todo desde que hablaba con celular hasta que se subió al carro.

Camila dejo el celular en su bolsa y prendió el carro para tomar rumbo hacia el almacén. En la radio se escuchaba una canción que le gustaba, con ánimo empezó a cantar y a tamborilear con los dedos el volante.

Cuando llego a un semáforo en rojo miro a un lado y lo que miro la dejo soñando, era una señora con una bebé en brazos, ella ya quería realizar ese sueño esperaba que fuera lo más pronto posible, tener un pedacito de Leonardo y ella seria magnifico. Cambiando a color verde el semáforo dio un vistazo al retrovisor y miro que un carro estaba muy cercas de ella pero pensó que no sabía manejar. Tomo aire y acelero.

Siguió con su camino pero volteaba por momentos a ver el retrovisor pero la dejo helada al ver que aun la seguía ese carro, hizo maniobras y lo mismo hacia el carro de atrás. Acelero más para tratar de perderlo pero fue imposible ya que cada vez se acercaba más a ella.

-No puede ser – se repetía Camila con un poco de temor ya que iba en carretera y no había alguna autoridad cercas. De pronto sintió un golpe por atrás que hizo que saliera disparada para adelante. De pronto empezó a sentir a cada momento los golpes - ¡No! – grito Camila mientras aceleraba más y miraba por el retrovisor.

De pronto el carro de atrás se le emparejo y empezó ahora golpear por un lado, Camila trataba de mirar a la persona pero no podía ya que el los vidrios eran polarizados y el volante se quería ir de sus manos. En un momento donde trataba de buscar una solución el carro aprovecho ya que se miraba una curva y sin más golpeo más fuerte el carro de Camila sacándola de la carretera.

Camila sintió su vida pasar por un minuto, no pudo, perdió el control y ahora se estaba yendo por un barranco.

La persona que iba en el carro freno más adelante para llamar a la persona que esperaba esa llamada.

-Ya, listo.

-Gracias, tiempo de show.

-¿Cuándo obtendré mi pago? – le decía con mal humor.

-Yo sé cuándo, tu no vengas a decirme y menos en ese tonto imbécil.

-De acuerdo señorita pero acuérdese que conmigo no se juega – le advirtió a la mujer del otro lado.

-Deja tus amenazas y mejor piérdete, yo te llamare para darte el pago, solo espero que tu trabajo fuera perfecto.

-No tenga duda – sin más le corto y prendió el carro para irse de aquel lugar.

-¡Papá! – le grito su hija desde el carro.

-¡Ya te dije, Rita! ¡Llama a una ambulancia! – le respondía su padre mientras bajaba por el barranco con cuidado tratando de ayudar ya que momentos antes había visto como aquel carro había aventado al otro.

Llegando al carro miro que una mujer estaba recargada contra el volante y sangrando de su cabeza. Tenía la cara muy dañada por el golpe ya que un árbol evito que llegara hasta abajo, pero sin pensar más trato de sacarla antes de que pasara una tragedia.

-¡¿Papá?!

-Aquí estoy, ¿Qué te dijo la ambulancia?

-Ya vienen.

-Ayúdame a subirla.

Rita y su padre, entre los dos empezaron a sacar a Camila y tratar de llevarla hacia arriba. Llegando los tres arriba Santiago miro que de un costado salía sangre.

-Rita, ¿Cuánto se iba a tardar esa ambulancia?

-No se papá, solo me dijo que no tardaban.

-Esta mujer se está desangrando y si no tiene atención médica ahora puede morir.

-¿Qué vamos hacer?

-Ayúdame, abre la puerta de atrás y la llevaremos al hospital, llama a Gabriel y que tenga todo listo para operar.

Una disculpa ante todo, la laptop estaba descompuesta :(
Pero ahorita voy a seguir subiendo de todo lo que guarde 😁


Ya no queda nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora