Lía no lo podía creer, frente a ella estaba Emmanuel, no imagino que así iba ser su rencuentro ella lo tenía planeado de otra forma pero no así. Emmanuel no pudo preguntarle que hacia allí porque el padre de Camila se le acercó y le hablo.
-Emmanuel, por favor acompáñame un momento afuera, necesitamos hablar – le pedía el padre de Camila al momento que le agarraba el brazo.
-Discúlpame pero yo de aquí no me voy a mover hasta que el doctor salga y me diga que Camila está bien.
-Eso no te interesa a ti, ella ya no es nada para ti – le decía un Leonardo con la vista clavada – Por respeto deberías retirarte de aquí.
-Leonardo, me puedes acompañar por vasos de café, aquí las chicas y la mama de Camila los necesitan.
-No me voy a mover de aquí...
-Hijo, por favor puedes traernos esos vasos, los necesitamos mucho – agarrándole la mano le pedía la mama de Camila con lágrimas en los ojos – Si llega a salir antes de que tu llegue, les digo a una de las chicas que vaya avisarte.
-De acuerdo pero tranquila, Camila va a estar bien, ella es una guerrera.
-Así es, hijo – terminando de decir eso le dio un abrazo tratando de transmitirle paz, ella no quería que se descontrolara por la llegada de Emmanuel. Lo que también miraba era a Lía, ella nunca estuvo de acuerdo con esa amistad pero Camila la quería demasiado a su amiga.
Cuando miro como se lo llevo Lía agarrándole la mano con mucha confianza deicidio que después de toda esa pesadilla hablaría con ella.
-Emmanuel, ¿Cómo te enteraste que Camila había sufrido un accidente? – le pregunto el papá de Camila a Emmanuel después de ver que Leonardo y Lía se retiraban.
-Estaba en casa de mis padres recuperándome y recibí una llamada de un amigo en común que tenemos Camila y yo y me dijo del accidente de Camila, que si iba a venir y más cosas. Cuando me entere que ella estaba aquí vine a pesar de las recomendaciones de mis padres de dejar pasar un poco de tiempo.
-Gracias por estar aquí pero te pido que si no vas a respetar a la familia y a la pareja de mi hija, te retires, ¿de acuerdo?
-Lo siento por mi descontrol de hace unos momentos, pero entiende la persona que perdiste por idiota y ver lo que le paso no pude controlarme.
-Yo se...
-Familiares de Camila... - preguntaba un doctor de aspecto serio y fuerte. No había terminado de decir el apellido porque a su llamado llego una señora y detrás de ella unas jovencitas y dos caballeros.
-Doctor, ¿Cómo se encuentra mi hija? ¿Está bien, verdad? – Le preguntaba la mama de Camila con desespero – Luna y Sara vayan a buscar a Leonardo.
-No es necesario, aquí estoy – agitado llegaba Leonardo ya que faltando poco para llegar con la familia escucho que preguntaban por los familiares de Camila y sin más corrió.
-Bueno, la señorita llego aquí con varias fracturas, de una pierna, dos costillas, varios golpes en su cara una herida que suturamos y otra más a un costado del abdomen que requirió cirugía
-¿Pero está bien? – preguntaba Leonardo con la vista directa al doctor.
-Sí, afortunadamente la herida no fue tan profunda para llegar a tocar algún órgano.
-¿Cuándo la podemos ver?
-Aun no la pueden ver, pero cuando la suban a cuarto yo vendré avisar.
-Muchas gracias doctor, gracias por mi Camilita – agradeciéndole y tomando su mano le decía la mamá de Camila, Luna y Sara abrazaron a su padre que aunque fuera fuerte al momento que le avisaron que su hija estaba fuera de peligro agradeció a dios y sin más salieron unas cuantas lágrimas. Emmanuel al igual que ellos se llevó las manos a la boca y cerrando los ojos, agradeciendo que Camila se encontraba bien.
Lía se encontraba en una esquina viendo a Emmanuel como se tranquilizaba por las respuestas del doctor, eso fue una suma a su odio a Camila, el no debería estar así por ella. Ella no merecía el amor de nadie, ella se lo había quedado y dejándola con ese amor profundo que sentía por Emmanuel.
-Bueno me retiro cualquier cambio o aviso yo vendré personalmente y les diré.
-Si doctor, muchas gracias – fue lo que le dijo Leonardo antes de tomar de las manos a la mamá de Camila y sentarla con ella. A ellos llego las hermanas y el padre. Emmanuel imitando lo mismo que ellos se fue a sentar del otro lado bajo la mirada de Lía aunque sabía que debería hablar con ella, sentía que no era momento.
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Ya no queda nada
Romance¿Cómo soportar una traición, una infidelidad y varias mentiras? preguntarte en qué momento sucedido y porqué? Solo dejar que el destino contesté tus preguntas.