UNA VEZ MAS EN TU VIDA

7

Pov Levi

Una vez que perdí la camioneta de vista, me levante y fui hacia donde estaba Sasha con Riren, se veía triste y la verdad no se porque, pueden haber muchas razones, pero solo lo sabré cuando hable con él, mientras que me acercaba, mi pequeño venia hacia mi corriendo, en cuanto pude lo tome en mis brazos y lo abrase fuertemente.

-¿Estas bien? ¿No te hizo nada?- lo revisaba por todos lados verificando que estuviera bien, ya una vez que lo revise totalmente y lo abrase una vez más.

-Estoy bien, papi- me dijo esto devolviéndome el abrazo, mientras que seguía con él en brazos camine hasta el auto y lo subí, espere a que Sasha se subiera y comencé a conducir.

Llegamos a casa, durante todo el camino estuvimos en silencio, no se medio palabra alguna, estaba conmocionado aun, estaba aliviado de que mi pequeño estuviera sano y a salvo, más no lograba entender quien era ese con el que estaba mi niño, que era lo que se proponía, en especial porque me amenazaba, al entrar a casa mande a Riren a su cuarto y me quede en la sala con Sasha, parecía nerviosa, tal vez cree que la culpo por lo que sucedió, pero es mas que evidente que no es así, lo mas probable es que lo crea gracias a mi ceño fruncido, lo que sucedió no me tiene para nada contento, todo lo contrario, estaba enfadado y no pensaba quedarme de brazos cruzados, me senté en el sillón individual, mientras que ella pretendía quedarse de pie, suspire y le dije que se sentara, ella obedeció.

-¿Estas bien?

-Si...

-Imagino que no conoces a quien estaba con Riren- le pregunte aun sabiendo la respuesta.

-No señor, es la primera que él se acerca a un adulto.

-Dime todo lo que recuerdes de lo que sucedió en el parque antes de quedar inconsciente.

-Nosotros llegamos al parque, Riren estaba emocionado, corría para llegar rápido a la casa del árbol, hace como una semana que siempre que vamos al parque juega ahí desde que llegamos hasta que nos vamos, en una ocasión llegue a subir para ver que hacia y estaba solo, como es de costumbre, aunque si hay una gran ventana, y hoy como de costumbre subió con su mochila a jugar, después de un rato sentí que me golpearon en la nuca y fue cuando quede inconsciente.

-Entiendo, pero Riren no le sonreiría a cualquiera por lo que con mayor razón debo hablar con él- ella asintió, suspire y me dirigí a la habitación de mi pequeño, cuando llegue toque la puerta -voy a pasar- entre y estaba acostado en la cama, me senté en el borde de esta, y el se sentó al lado mío, lo abrase fuerte, no quería soltarlo después de ese susto, en el cual existía la posibilidad de que se lo hubiesen llevado -¿enserio no te hicieron nada?

-Nop, papi, él no me hizo nada, comimos helado- me dijo mi pequeño sonriente.

-¿Quien es esa persona Riren? ¿Cómo se llama? ¿Dónde lo conociste?- desvío la mirada, cosa que no me gusta para nada, se lo que significa -cariño solo quiero saber quien es.

-Pero...- seguida sin mirarme y cuando lo hace es porque algo quiere esconder.

-No va a pasar nada malo- trataba de hacer que pudiera confiar en mi como en otras ocasiones lo a hecho -no tienes porque temer, solo quiero saber ¿me contarás?- le dije esto mientras lo sentaba en mi regazo.

-No- y lo dijo de una manera firme.

-¿Por que?

-Es que... me pidió que no dijera nada y yo le prometí que no lo haría- ahora lo comprendía, y era en momentos como este en los que a veces los padres nos alegra y preocupa que cumplan con lo que se les a inculcado, pero no me rendiría.