{Shawn Mendes One Shots}^

Allison👻

3.

—Eres hermosa, pequeña Saskia.—Shawn acarició con cuidado la mejilla de nuestra pequeña bebé.—Gracias por esta maravillosa personita, Sally.

Ella había llegado a este mundo un poco más pronto de lo esperado pero aún así estaba lo suficientemente fuerte como para ir a casa con nosotros.

Aún seguimos sin saber que fue lo que me llevó a tener un parto prematuro, mis doctores creen que ha sido estrés, yo también lo creo pero Shawn sigue haciéndose el tonto al respecto.

He tratado de sobrellevar la situación de Allison desde que descubrí quien es en realidad pero últimamente me resulta imposible. Ha estado coqueteando descaradamente con Shawn frente a mí y aunque le he recriminado miles de veces sigue con lo mismo. ¿Porque diablos se empeña tanto en destruir a una familia? Ahora mismo solo puedo pensar en que estaba pensando Karen al llevar a una arpía a mi hogar.

—Ya no sé qué hacer. Esa mujer va a destruir todo lo que he reparado. Si esto sigue así Shawn y yo estaremos al borde del abismo.

—¿Has intentado buscar más ayuda?

—Shawn rechaza a cualquier persona que contrato. Es como si ella le tuviese idiotizado. Y de solo pensar que él y ella puedan tener algo...

—¿Has hablado con él?

—Solo habla de la bebé cada vez que estamos juntos. Las cosas cambiaron mucho. Es como volver al pasado.

—No digas eso. No te rindas, Sally.

—Anoche estuve a punto de quebrar tres años de sobriedad. Tenía la botella frente a mí, me serví una gran copa pero solo me quedé mirando por horas. No me atreví a hacerlo.

—¿Tiraste esa botella?

—Solo la he escondido.

—¿Quieres que sea yo quien hable con Shawn?

—No, yo lo haré. Y espero que funcione.

.

—Shawn, ¿Podemos hablar?.—Asintió sin prestarme la atención suficiente, solo se encargó de mecer en sus brazos a mi hija.

—¿Que sucede?

—¿Recuerdas aquella vez en la que me sentía muy insegura respecto a Allison?

—Si.

—¿Y que la despedirías si me llegase a molestar?

—¿A dónde quieres llegar con esto?

—En este momento me siento de la misma manera que aquella vez. Ella no es una buena mujer. No la quiero cerca de mi familia, Shawn.

—Sally...

—Solo hazlo por el amor que me tienes o solías tenerme.

—¿Quién ha dicho que no te amo, linda? Te adoro.

—¿Entonces puedes hacerlo?

—Lo he intentado en varias ocasiones, créeme, pero cada vez que lo intento ella comienza a hablarme de que tanto necesita este trabajo. No tengo corazón para despedirla.

—Ella no es quien dice ser, Shawn. Encontré un par de cosas sobre ella que no me agradaron en lo absoluto. Ya no la quiero aquí.

—Bien, hablaré con ella en un rato más.

—Gracias.—Estaba por besar sus labios cuando aquella chica entró con las botellas de licor que había comprado en mi momento de debilidad. Demonios.

—Encontré las botellas debajo del lavaplatos. ¿Las dejo en la alacena? No he visto que tengan un mini bar aquí.

—Desechalas. No tienen que estar aquí. Sally, ¿Las has comprado tú?

Cuando ví el rostro satisfecho de aquella mujer mi deseo de golpearla aumento de manera descomunal.

—Si pero no tomé nada de ellas.

—A una le falta una buena cantidad de líquido.—Intervino aquella mujer.

—¡Retirate maldita perdedora! ¡Tú no eres absolutamente nadie para meterte en nuestros asuntos personales!.—Exploté.—Vete de aquí antes de que llame a la puta policía.

—¡Sally!

—¡Vamos! ¡Confiesa todo lo que has hecho! ¡Confiesa que eres una puta que solo busca las cuentas bancarias de los esposos de tus patronas!

—¡Sally ya basta!

—Pero...

—Será mejor que te lleve a casa de tus padres por unos días. Necesitas descanso.—Hijo de puta.

.

—¿No me dejarás a mi bebé?.

—No, Sally. Me haré cargo de ella mientras tú tratas de relajarte. Escucha, sabes que te adoro pero esto no puede seguir así. ¿Porque lo hiciste?

—Te juro que no lo hice. Lo tiré por el lavaplatos sin probar ni una sola gota, he estado sobria desde hace más de tres años.

—¿Y quién puede asegurarlo? Mañana te visitaremos, despídete de Saskia.—Besé la mejilla de mi pequeña hija y la dejé marchar junto a su padre. Solo espero que esa mujer no los lastime.

Dormí un par de horas antes de ser despertada por el insistente tono de mi teléfono. Era Calvin, un chico que vivía en mi edificio y me había ayudado a encontrar la información necesaria acerca de Allison.

—¿Calvin?

—¡¿Dónde estás?! ¡Sale mucho humo de tu apartamento!.—¿Que?

Conduje a casa lo más rápido posible y en efecto mi apartamento se estaba incendiando. ¿Que demonios ha pasado?

Sin importarme nada solo corrí escaleras arriba y entre a aquellos pasillos llenos de humo. Cuando me acerque a mi puerta ahí estaba ella con aquella mirada tan sinica y tranquila que causaba una desconfianza inmediata.

—¡¿Dónde está mi familia?!

—En el infierno.

¿Quieren saber en qué terminó esta historia? ¿Quieren saber que ocurrió con mi familia? ¿Con Allison? No lo sé. No lo sé porque aquella mujer huyó y lo que más quiero en esta vida se encuentran debatiendo entre la vida y la muerte. Ha destruido gran parte de mi vida y dudo mucho que ya haya acabado de hacerlo.

—Tranquila, Sally. Saskia no tiene ninguna quemadura, Shawn la ha protegido muy bien, ella solo está recibiendo un poco de oxígeno. Y Shawn no tiene quemaduras tan graves. Van a recuperarse rápido.

—Si no me hubiese separado de ellos esto sería diferente.

—Allison está siendo buscada por la policía. Ella no volverá a acercarse a ustedes. Resultó ser responsable por dos asesinatos y participar en actos de vandalismo en los hogares de sus antiguos patrones. Ella solo buscaba llevarse el dinero de Shawn.

¿Y si no es así?

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