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OKSANA.
21 de Septiembre 2018.
Me levanto silenciosamente de la cama y agarro mi mochila. Me cambio rápidamente en el baño, me peino y me cepillo los dientes. Guardo el pijama en la mochila, la cierro y me la pongo a la espalda, abro despacito la puerta del cuarto, salgo y la vuelvo a cerrar. Bajo las escaleras y voy a la cocina, miro la alacena y encuentro unas barras energeticas.

Me encantan esas barras.

Agarro unas cuantas y me largo de allí, voy hasta la puerta principal pero no abre, miro a mi alrededor y veo una cámara de vigilancia enfocando hacía la entrada, donde yo estoy. Sonrío y veo una cajita encajada a la pared.

¿Y cuál se supone que es la clave?

Podría abrir la puerta con una tarjeta pero podría sonar alguna alarma.

Abro la cajita y veo unos botones con numeros y letras de la A a la D.

Oksana, piensa.

Seguro que la letra será la B.

Tecleo 1111B, pero no es. 1112B, tampoco. 1234B, nada. ¿4321B?

Premio.

Abro la puerta y salgo de la gran casa por no decir mansión. Me subo a mi carro y me voy.

Conduzco hasta un mirador cerca de la playa, aparco y me siento sobre el capó del carro a mirar las vistas.

Prendo el celular y espero hasta que mi hermano llegue.

Son las seis de la mañana, pronto estará por salir el sol.

Como las barritas mientras veo el amanecer y las olas del mar.

•••

Un carro se aparca a mi lado pero ni siquiera miro.

-Oksana, por fin te encuentro.- Dice mi hermano acercándose donde mí.

-Me mintieron.- Murmuro con rabia.

-No te mentimos, te estábamos protegiendo.- Dice.

-¿Eres estúpido o te haces?- Pregunto mirándolo con bronca. -¿Cómo se le llama al acto de decir que no están haciendo algo cuando en realidad sí lo están haciendo?

-Es diferente, te estábamos protegiendo.- Repite.

-¡¿Protegerme de qué?!- Digo bajando. -Sabes que sé defenderme sola.

-Vuelve a la casa, mami está muy angustiada.- Dice.

Me subo al carro y me voy a la casa.

Aparco el carro y bajo de este, camino hasta la entrada y abro la puerta con la llave.

Tengo que enviarle un mensaje a Bryan.

-¡Hija!- Dice mamá viniendo hacia mí.

-Hola.- Digo seria sin hacerle mucho caso.

Camino directamente hasta el despacho de Iván y entro sin siquiera pedir permiso.

-Ya me tienes aquí.- Digo sentándome en una de las sillas frente su escritorio, mi hermano entra y se sienta en la otra.

-¿¡En qué pensabas cuando te fuiste, ah?!- Reclama mi padre bastante enojado.

-En que son unos mentirosos que me engañaron desde que estamos aquí.- Digo.

Toma una profunda respiración.

-¿A dónde fuiste?- Pregunta.

-A un hotel.

-No mientas.

-Irónico que me digas que no mienta cuando tú fuiste el primero en mentir.- Digo.

OKSANA: La apuesta. ('VOLKOV' #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora