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OKSANA.
25 de Marzo 2019.
-Y hablando de Puerto Rico, ¿quién era el hombre al que apuntaste la noche de Yaguar vs. Razrushitel?- Pregunta mientras me mira copa en mano.

-Nadie por el que debas sentirte atacado.- Digo insinuante.

-¿Qué quieres decir con... Atacado?- Pregunta mordiéndose el labio sutilmente.

Me meto un bocado de comida mientras sonrío.

-Claro,- Digo. -hay gente más peligrosa a la que deberías tenerle miedo, por ejemplo...

-... A mí.- Dice mi hermano colocando su Smith&Wesson en la sien de Hedeon.

Toda la gente en el restaurante, comienza a gritar.

Agarro la mochila de mi hermano, la cual estaba en el suelo, y saco los doce millones de rublos, en billetes de dos mil, repartidos en ocho pacas.

Aquí en Rusia aprendí que si quieres que los demás estén calladitos, no solo vale con el miedo por ser quién eres, sino que debes darles lo que quieren, dinero.

Empiezo a repartir el dinero y me voy.

-Aquí no ha pasado nada.- Digo mientras mi hermano saca a Hedeon a punta de pistola.

...

Camina, joder!- Le grita mientras entramos a aquella vieja casa.

Esto se va a poner... Interesante.

-Quítate la ropa.- Dice mi hermano.

-A mí no me mires.- Le digo al notar la mirada de Hedeon en mí.

-La camisa también.- Dice mi hermano al notar que solo se saco los pantalones y los zapatos.

-Tengo una heri.

-¡Quítate la camiseta!- Grita como si tuviera al diablo dentro de él.

-¿¡A qué esperas!?- Le apunto con el M16.

Me mira con miedo y se saca la camiseta

-¿Qué me vas a hacer?- Le pregunta a mi hermano.

-Si yo te pego un tiro, tú solo vas a morir y ya, no sufres. Eso no es lo que quiero, sería muy fácil.- Dice Alek. -Ahora vas a ir con dos quilos de explosivos pegados a tu cuerpo, los voy a detonar, pero no vas a saber cuándo.

-Alek, eso es mucho, ten cuidado porque se te puede salir de las manos.- Le digo mientras él abre un viejo armario lleno de C-4.

-Este traidor a nos ha querido joder más que la fucking policía.- Me dice. -Por su culpa casi te secuestran los que nos secuestraron de niños.- Le pega el primer explosivo. -Por su culpa no sabemos cuánta información ha estado pasando, te ganaste mi confianza, te convertiste en mi amigo, pero con esto,- Le enseña una de las bombas. -se acaban todos los problemas.

Diablo...

-No quites los cables, si no explota.- Le advierte una vez acabado el trabajo. -No hagas movimientos bruscos, si no explota. No sudes, no toques tu cuerpo... El detonador, Belyy.

Abro la mochila y se la doy con muchas dudas dentro de mí. Nunca había visto así a mi hermano, nunca había imaginado que la maldita puerta haría que ocurriera todo esto.

-Si yo aplasto esto, boom.- Se le ríe en la cara. -Nadie te va a reconocer.- Se vuelve reír. -Picadillo de Hedeon... Me caías bien, ya sabes, por tu forma de ser tan... Explosiva. -Se vuelve a reír, dejándome bien claro que mi hermano ya no es como yo pensaba que era.

OKSANA: La apuesta. ('VOLKOV' #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora