¡Ey! ¡Tú! ¡Hola, Soy Homicidal Bloody! Pero puedes llamarme Bloody.
Este libro contiene 200 capítulos completos y actualmente está en edición.
Y si tú crees que yo escribo algo cliché, créeme. No lo verás JAMÁS en mi libro, intenta darme un pedido c...
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Kristal llegó a la habitación del ojinegro tocando la puerta antes de entrar, y al no recibir una contestación desde el otro lado decidió entrar a la habitación mientras avisaba. Las luces estaban completamente apagadas pero la luz del balo seguía encendida y se filtraba un fino hilo de luz de la puerta media abierta.
Estaba por emitir unas palabras cuando un sollozo sonoro la dejó helada y estática, entonces se comenzó a acercar a la puerta hasta poder observar por la rendija. Se observaba su espalda debido a que él estaba frente al espejo, llorando en silencio y soledad. Ella suspiró profundamente antes de abrir la puerta lentamente, hasta abrirla por completo.
YoonGi notó su presencia a través del espejo, parada detrás de él, entonces se volteó hacia ella mientras secaba rápidamente unas cuantas lágrimas de sus ojos. Para caminar hacia la cama y acostarse en ella mientras Kristal se volteaba sobre sus talones y lo seguía hasta quedar frente al mueble.
—¿Me dirás que pasa? —no respondió pero le dio su celular en manos. Ella se acercó a él y se sentó en el borde de la cama mientras una mano estaba sobre su hombro en señal de consuelo. Ella comenzó a revisar los comentarios de aquella plataforma de multimedia, leía unos cuantos comentarios buenos sin embargo, el resto de ellos eran denigrantes, xenofóbicos, y bastante violentos. Incluso le dolieron a ella y no eran dirigidos a su persona. Volteó la vista hacia YoonGi quien sorbía de sus nariz.—Oh... Yoon.
Se acomodó en la cama de forma que ella lo abrazara por la espalda mientras repartía suaves y leves caricias en su cabellos y sus brazos, mientras que al mismo tiempo besaba delicadamente su nunca.
—Tu sabes que todo lo que ellos dicen no es cierto. —besó su nuca y él se volteó hacia ella para observarla.—¿Qué objeto tiene insultar a otra persona cuando sabes perfectamente que aquello no es cierto?
—Kristal. Soy un fracaso en esto. Debería renunciar a la música y dedicarme a otra cosa.
—Si lo haces, entonces ¿es lo que quieres? ¿o lo que ellos quieren? Porque desde que te conozco tu vida y tu sueño están dedicados plenamente a la música, es tu amor utópico. De lo contrario, si lo dejas entonces les harás sabes que ganaron, que pudieron derribar al increíble Min YoonGi, el aclamado Agust D. Eso sólo reforzaría su estúpido ego. —ella acarició su mejilla—YoonGi, eres la persona más cálida, tierna, dedicada, sensible e inteligente que he conocido. Tú has inspirado vida a las personas que no tenía esperanza en ella, les has hecho saber que la vida es una y debes valorarla antes de que se vaya. Yoon, tú eres malditamente perfecto así. No hay nada, ni nadie que pueda vencerte. Eres tú, y ser tú significa ser Min YoonGi.
Él rió amargo mientras mordía su labio inferior para evitar soltar el llanto que comenzaba a acumularse en forma de nudo en su garganta. Desvió su vista en un punto perdido en la habitación, pero evitando verla a ella. Porque si de algo sabía YoonGi era que su novia era demasiado buena con las palabras, y en especial si venía en forma poética porque lograba conmover mucho a las personas.
Ella tomó rostro entre sus manos y comenzó a acariciar su mejilla izquierda con su pulgar mientras lo observaba con una diminuta sonrisa. Y el suspiró para poder aliviar un poco ese nudo en el medio de su garganta. Sintió como sus lágrimas se amontonaban en sus ojos y entonces con las palabras de Kristal: "Si quieres llorar, hazlo amor" fueron suficientes para que él se acercara a ella y se abrazara a su cuerpo para así esconder su rostro en su cuello para que Kristal no lo viera ser tan débil, tan vulnerable y frágil. Y se sentía protegido si ella estaba con él, se sentía querido, amado y feliz... como nunca antes lo había estado.
Se sentía bien, se sentía único y sólo estando con su persona lo hacía sentir sobre las nubes. En esa paz mental y física que siempre ansiaba con tener y poseer toda la vida, y ahora había descubierto que solamente se lograba si estabas a su lado. Ese amor que ella le estaba dando todos los días en palabras y acciones era suficiente, era suficiente para que YoonGi amara ser él porque, sino era él no la tendría a ella. Y odiaría no ser Min YoonGi el novio de Kristal.
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