17.-Taurus 04

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He pasado las vacaciones de Navidad en la mansión con mi hermano y con mis padres. Ha sido incómodo.Que mis padres no me regalaran nada como de costumbre no me importaba. Bueno algo sí que me importaba. Pero ya me he acostumbrado. Desde hace unos cuatro años que no lo hacen. La primera vez que no lo hicieron porque se les olvidó les hice saber que no me importaba, que de todas formas los regalos me parecían una chorrada. No sé si les enfadó mi comentario o les di la excusa perfecta para no tener que perder más tiempo en regalarme cosas, pero desde entonces para mi la Navidad no equivale a juguetes. 

De haber sabido las consecuencias de ese comentario que hice me hubiera callado. Si lo hice fue para que no se sintieran mal por olvidarse de mi regalo. De bueno soy tonto. A mi hermano le he  regalado una figura de porcelana de su jugador de quiddich favorito. Me lo ha agradecido pero sin sentimiento.

 Es la primera vez que estamos tan distantes Draco y yo desde que tengo memoria. Sé el motivo cual es. Intenté arreglarlo. A mi manera, es cierto. Pero intenté arreglarlo. Suponía que a estas alturas ya habríamos hecho borrón y cuenta nueva. Por lo visto no ha sido.

El motivo, o mejor dicho, los motivos tienen nombre y apellido. Violet Potter, Harry Potter, Hermione Granger y Ronald Weasley. Mejor conocidos como la traidora, el huerfanito especial, la sangresucia y la comadreja. No sé cuantas veces me he mordido la lengua cada vez que pasan cerca mío.

Me di cuenta que mi hermano los apreciaba el día de la primera clase de vuelo. Cuando cogí prestada la recordadora del torpe traidor a la sangre. 

El primer indicio que tuve fue cuando defendió a la traidora y a su hermano ese día dejándome mal. 

El segundo fue cuando insistió que no me pasara contra la comadreja en duelo de magia.

El tercero fue cuando decidió irse a esconderse con ellos en vez de quedarse conmigo para enfrentar al squib.

Ahí tomé cartas en el asunto. Traté de ver que eran inferiores, metiéndome con ellos más de lo habitual por cualquier motivo insignificante. Pensé que si veía como todo Slytherin les odiaba le haría abrir los ojos. 

Me salió el tiro por la culata. Cada vez hablábamos menos de nuestras cosas, y cada vez discutíamos más. Odiaba discutir con mi hermano. 

Durante el partido de quiddich de Slytherin contra Gryffindor me fijé en dos detalles. Lo primero era que noté aliviado a mi hermano cuando Potter atrapó la snitch con la boca. Habíamos perdido contra nuestros mayores rivales y Draco se alegraba que a Potter no le pasara nada malo. Desde luego mi estrategia había sido una tremenda cagada. Lo segundo fue hizo Potter fue inhumanamente posible. Me considero un experto en el quiddich por todas las horas que he practicado y he visto por televisión. Lo que hizo Potter...rectifico. Lo que hizo la snitch fue antinatural. 

Esto hizo darme cuenta que mis enemigos no eran los Potter, sangresucia y comadrejas que pululan por el mundo. Al fin y al cabo, son seres inferiores a mi. A nosotros. A los Malfoy. 

Mi enemigo siempre ha sido el mismo. Albus Dumbledore. Se me olvidó las advertencias de mi padre sobre ese viejo barbudo por culpa de sus comentarios de loco y su sonrisa bobalicona. Es un zorro viejo astuto. Estoy seguro que fue él el que hechizó la snitch para que fuera directa a su boca. ¿El motivo? Ni idea. Ayudar a que Gryffindor ganara el partido me parece un resultado muy pobre para los riesgos que conlleva hechizar una snitch sin que te pille. Tampoco entiendo que hace un cerbero en el pasillo del tercer piso y tampoco entiendo como no llegó antes que mi hermano, Potter y comadreja para enfrentarse con el troll. Se supone que es el mago más fuerte y más sabio del mundo. No me creo que sea una casualidad que dejara que Potter se enfrentara a ese troll. 

Lo único que sé seguro es que los comportamientos extraños de Dumbledore están relacionados todos ellos con Potter. Con el niño que vivió a Voldemort....Quizá estoy pensando demasiado.

Así que decidí cambiar de actitud. Ignoré a los cuatro imbéciles confiando en que Draco agradeciera el esfuerzo que estaba haciendo para no tratarlos mal. Pero me equivoqué otra vez. No nos hablamos. Pero por lo menos no discutimos. Así que ahora solo me queda esperar. El tiempo lo cura todo.

Y también me queda averiguar qué trama Albus Dumbledore.


Efecto Mariposa - DramioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora