¡ once !

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Jisung se despertó cuando sintió varios golpecitos en la puerta de la habitación. Sus ojos ardían y el celular en la mesita de luz indicaba que no había dormido más que treinta minutos. Las lágrimas seguían en sus mejillas, secas y molestas. 

—¿Sungie? —preguntó la voz casi irreconocible de Minho al otro lado de la habitación— ¿Puedo pasar?

Han quiso reír y decirle que era su habitación, que no tenía que preguntar para eso. Pero no respondió, no hizo nada. Se quedó sentado en la cama con sus manos entrelazadas, mirándolas fijamente y esperando que su Hyung favorito fuese a dormir al sillón. 

—Sungie —volvió a hablar luego de un rato—. Voy a entrar.

La puerta se abrió y un Minho bastante arruinado por el alcohol, el poco sueño y por haber llorado un buen rato, pasó. 

Ver a Jisung así le dolía como nada le había dolido nunca. Nunca lloró cuando su papá se fue o cuando su mamá eligió que trabajar en otro país y mandarle dinero mensualmente sería una buena idea. Minho no lloraba, y no quería ver llorar a Sungie por él. 

Con una sonrisa torcida y llena de decepción, se sentó frente a Jisung con las piernas cruzadas.

—¿Quién fue el idiota que te hizo llorar? No deberías llorar por idiotas...

—No es gracioso. 

—Perdón.

—¿Por qué? —Jisung levantó la vista y observó quietamente a Minho, queriendo odiarlo y decirle que se vaya, pero siendo incapaz. 

—No sé, Sungie. No sé. Estaba borracho.

—No habías tomado tanto.

—Tengo poca resistencia —susurró.

Han suspiró y tragó el nudo de su garganta. No quería hablarle, no quería verlo. No quería sentirlo llorar frente a él y abrazarlo. No quería, pero lo necesitaba tanto.

—Me duele el corazón, Minho Hyung. 














[🐿] Heyyyy! Hola uwu♡
Venía a avisar que a partir de acá se busquen unos pañuelitos porque no me hago cargo de la cantidad de cosas tristes que puedan pasar 😔😔😔🤙

CRY ━ MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora