¡ sesenta y uno !

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283 días antes


Era un día especial, demasiado especial. Estaba anotado con corazones en el calendario del cuaderno de Jisung y con resaltador en el calendario que Minho utilizaba para organizar sus exámenes. 

Un día definitivamente muy especial. 

Jisung despertó sintiendo un calorcito agradable en el pecho. Abrió los ojos despacio y sonrió al ver a Lee aún durmiendo a su lado. 

Cumplían dos años juntos. 

La mirada de Han estaba clavada en el rostro sin emociones de Minho, en sus ojitos cerrados, en su nariz perfecta y el lunar que la adornaba tiernamente; pero especialmente miraba lo chistosos que se veían sus labios. Estaban abultados en un inconsciente puchero, como si estuviese haciendo un dulce capricho para conseguir algo. 

Lentamente, acomodó el cuerpo de Minho para poder subirse sobre él y dejar varios besos en su rostro. Luego de un rato que para Jisung pareció eterno, Minho comenzó a despertarse y posó sus manos en la cintura de Jisung.

—Buenos días —susurró Sungie sobre los labios del contrario.

—Buen día bebé. ¿Cómo dormiste?

—Bien —Jisung sonrió al sentir las manos de Minho subir por su espalda y acariciarlo como sólo él sabía hacerlo. 

Después de un rato, tomó despacio a Jisung por la nuca y acomodó el rostro del menor entre su cuello. Han sonrió enternecido por la acción y dejó que Lee lo llenase de amor. 

—Sos tan precioso cuando te pones así de tierno —dijo Jisung sintiendo sus labios rozar con el lóbulo de Minho. 

—Es por vos. No puedo ser de otra forma cuando estoy con vos encima mío, sintiéndote respirar tan calmado, despertándome con besos y esas sonrisas tuyas que tanto me gustan —Jisung se separó para mirar a Lee con sus ojos irradiando amor—. Dos años juntos y todavía no sé como hacer para no caer rendido a tus pies cuando me miras así.

—Dos años con título, estuvimos muchísimo más antes de eso. Casi diez años, ¿no?

—No te voy a mentir, no sé.

Jisung rió y dejó un largo y tierno beso en los labios de Minho. El vaivén era lento y no tenían intenciones de pasar a mayores; estaban transmitíendose todo el amor que se tenían sin necesidad de utilizar palabras.

—Quiero quedarme eternamente en vos, Sungie. 

Jisung asintió, ambos sabían que pensaban lo mismo y no era necesario aclararlo.

Sintieron un ligero peso acomodarse junto a ellos y rieron. Dori también quería festejar con ellos. 






no les voy a mentir, no actualizo Cry porque me niego rotundamente a terminar la historia.

CRY ━ MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora