Se remueve un poco al sentir el frío en su cuerpo, se ha destapado un poco, así que toma la manta para cubrirse otra vez, deben ser alrededor de las 4 de la mañana. Se gira y se queda embobado mirándola. Es perfecta, con sus rizos revueltos sobre la almohada y sus labios entreabiertos. Su rostro solo iluminado por la luz de las farolas de la calle.
Le encantaría besarla.
No es una buena idea, pero se acerca un poco a ella, despacio, y cuando está apunto de unir sus labios, en un beso inocente, Miriam se mueve. Se aleja rápido y finge estar dormido, esperando no haberla despertado, pero la gallega solo se mueve en la cama y gira para abrazarlo. El aroma de su perfume le provoca un escalofrío. Le encanta.
Han cenado juntos, se han enamorado aún más del pequeño gallego, han reído, y lo que solo iba ser una cena, se ha alargado unas horas más. Hugo y su novia se han tomando su tiempo para volver a casa., pero es que teniendo la certeza de que el pequeño estaba perfectamente, con los mejores canguros que podrían haber encontrado, cualquiera en su lugar habría aprovechado.
Hunde un poco su nariz entre los rizos de la gallega y la abraza también. Ha decidido luchar por ella, enamorarla y tenerla a su lado. Lo va cumplir.
Agradece que su hermano haya llegado tan tarde, es la razón para que en ese momento su amiga utilice una de sus camisetas y uno de sus pantalones como pijama. No podía irse tan tarde, y la mejor opción era que se quedará a dormir con él. Solo pensar que va amanecer junto a ella, le pone feliz.
Va ser su mejor despertar, aunque no solo para él, también para ella, aunque no lo sepa.
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Encontrar una persona con la que te complementas a la perfección, con la que pierdes los miedos a mostrar tus sentimientos, a mostrarte tal cual eres, con la que puedes sentirte completamente libre y a la vez, sentirte tan atado a ella, es difícil. Pero no imposible.
Raoul lo sabe, porque solo con mirar a Agoney, siente que no le falta nada, que esta completo. Y es la mejor sensación que ha sentido en su vida.
Lo observa dormir con sus labios entreabiertos, su rostro relajado, con sus brazos abrazándole y sus dos manos morenas entrelazadas a su alrededor, como impidiendo que Raoul se aleje de él. Cosa que ha conseguido, porque el rubio no se ha movido en toda la noche, ha dormido prácticamente encima del canario, y hacia tantas noches que no dormía tan a gusto, que tal vez esa sea su mejor opción desde ahora.
Se acomoda de nuevo, aferrándose por completo al cuerpo del moreno y puede sentir como su amigo, aun dormido, también refuerza el enlace de sus manos, previniendo que Raoul pueda moverse. Todavía es temprano, es sábado y no hay nada mejor que seguir disfrutando de su calor, es por eso que cierra los ojos y vuelve a dormirse, inspirando el aroma de su cuello.
El móvil suena en la mesilla y les despierta a ambos. El moreno se remueve un poco y antes de contestar, ve la hora. Ya es medio día.
- Hola - contesta medio dormido mientras Raoul se acomoda sobre su pecho otra vez.
- Ago, buen día, o buenas tardes - ríe Javier al otro lado - Mira, que Damion me ha preguntado si nos apetecía cenar con ellos o no, te he escrito temprano pero como no respondías...
- Ya, lo siento, es que estaba durmiendo muy bien - sonríe y mira a su amigo.
Raoul le mira sonrojado y le devuelve la sonrisa, pero esta desaparece en el momento que Agoney habla otra vez.
- Mira Javi, no voy a poder quedar, ya he quedado con Raoul - le dice.
- Ah vale, pues a mi me viene bien porque la verdad no tenía muchas ganas de quedar, y no encontraba ninguna excusa, pero ahora la excusa de no ser sujeta velas me queda genial - se echa a reír.
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Confundidos - Ragoney (en Edición)
FanfictionRaoul recuerda cada momento de su vida junto a Agoney, y aunque no fueron su primer beso, ni fueron su primera vez, quizás siempre fueron el primer amor, aunque no supieron verlo.