31

2.3K 166 259
                                    

- ¿Entonces está todo claro? - pregunta Raoul mientras termina su café.

- Que si pesado - contesta Nerea al otro lado del móvil - Pero dejadle claro a Roi que la habitación disponible es la de Lucas.

- Que si enana.

- ¿Pero qué dices? - pregunta un adormilado Agoney, que intenta desayunar y despertarse al mismo tiempo - La idea es que se declaren, no que follen.

- Por si acaso - dice Nerea que está en el manos libre.

- Vale, yo le digo a Aiti que les deje condones en el cuarto de Lucas - dice Raoul girando los ojos.

- Bueno, yo os dejo que voy a llegar tarde, ya está todo listo, dejé todo servido y es el desayuno más romántico que he preparado en mi vida, cuando Aiti lo vea, me mata.

- Pues mañana madrugas y le preparas uno a ella - le aconseja el moreno.

- Ya, bueno os dejo, luego hablamos.

Finalizan la llamada y continúan con el desayuno.

- ¿Crees que salga bien? - pregunta Agoney.

- Si, es imposible que salga mal - sonríe Raoul.

- Ya, eso espero, porque si no, estamos muertos.

- No me seas agonías, anda.

- Pollito, estamos hablando de Miriam, de Miriam enfadada - le recuerda.

- Después de que Roi le coma la boca y lo que no es la boca, no puede enfadarse - le guiña un ojo.

- ¡Raoul!




- Madre mía, hija, ¿Pero para qué necesitas tantas cosas? Si Nerea tiene de todo - dice Miriam mirando las dos maletas y las dos cajas que contienen las pertenencias de su amiga, y recordando la cantidad de cajas que aun tiene en casa de sus padres, y que todavía deben ir a buscar.

- Pero si solo es mi ropa - se encoge de hombros mirando las cajas - Todavía me falta todo lo que ocupo para trabajar.

- ¿Todo esto es ropa? - abre los ojos.

- Si, es que no tenía otra maleta, por eso las cajas.

- Pues te traes algo y ya luego traes más, pero no te traes el armario entero - rueda los ojos la gallega - Que lo que utilizas para el trabajo es más importante.

- Es medio armario de hecho - abre la puerta del piso y deja pasar a Miriam.

- ¿Donde la dejo?

- En el cuarto de Nere, bueno, nuestro cuarto - sonríe, le encanta como suena.

Entran cada una con una maleta, dejando las dos cajas en la puerta, pasan hasta el cuarto y vuelven al salón.

- Mira, tú chica te ha dejado el desayuno y todo - señala Miriam al ver todo preparado en la cocina - Pero que bonito - sonríe mirando la decoración, con el mantel y las flores sobre la mesa.

- Ya - ríe Aitana, saca su móvil y lee un mensaje de Roi.

<Msj Roi: Acabo de aparcar, ahora subo.>

- Coge algo antes de que se enfríe - dice la gallega.

- No puedo, es que no es para mi, si no para ti.

- ¿Para mi? Ay mi chiquitina que bonita es, pero no hacia falta.

- Es que no es de Nerea - ríe la de flequillo y la gallega le mira confundida - ¡Hostia! Casi lo olvido, espérame aquí.

Confundidos - Ragoney (en Edición)Where stories live. Discover now