Confundidos - Ragoney (en Edición)

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Cuando abre los ojos aun es de noche, se gira para buscar su móvil y son casi las 5 de la mañana. Se acomoda de nuevo, despacio, para no molestar a Javier que duerme a su lado. Si, a su lado y no encima suyo, o al menos pegado a él, como hace cada vez que duermen juntos, y eso le parece extraño.

Lo observa dormir un momento y sonríe, desde que le conoce ha sido muy importante en su vida. Le ha ayudado mucho, no solo como profesor, si no como amigo porque han sabido escucharse y apoyarse cada vez que uno lo necesitaba. El cariño y la amistad que han desarrollado es tan importante como la de cualquiera de sus otros amigos, no importa si a Javier no le conoce desde pequeño, el vínculo que tienen es igual de fuerte al que tiene con los demás. Como Ricky y Nerea, que llegaron en la época de la universidad pero se quedaron en su vida hasta hoy, y espera que sea así siempre.

Quizás si hubiese tenido relaciones con Javier mucho antes no se sentiría así, tal vez estaría preocupado, pensando como afectaría eso a su relación, preguntándose si hizo bien o no en dar aquel paso, o creyendo que su amistad se había arruinado. Como aquella vez que pensó que se había pillado y pretendía algo más con él, ahora que lo piensa le resulta gracioso. Pero hoy no le preocupa, porque se conocen, y en dos años han creado la confianza necesaria como para hablar de cada tema sin problemas. 

El sexo fue un tema que hablaron muchas veces, porque el mayor quería que su primera vez con un hombre fuera cuando estuviera cien por ciento seguro, y no por un arrebato de calentura en uno de sus encuentros. Y así ha sido, lo ha pensado durante días, quería hacerlo y Javier le ha cuidado como pensaba, con cada palabra y con cada beso le ha hecho sentir cómodo y seguro. Y está agradecido por eso.

Que Raoul le haya animado es algo que le tranquiliza, es su mejor amigo, le entiende y le conoce como nadie. Pero tal vez la razón es que su amigo pasó por lo mismo, él también tenía miedo en ese momento, y Lucas le dio la confianza que necesitaba para dar ese paso.

Javier y Ana son dos personas importantes en su vida, la canaria le acompaño en sus primeras experiencias, y si no se hubiese ido fuera del país a continuar sus estudios, está seguro de que seguirían siendo grandes amigos.

Sabe que su relación con el profesor seguirá igual, no debe preocuparse por su amistad, porque tienen claros sus sentimientos. Y está feliz de haber disfrutar de su sexualidad con alguien que le quiere, que le ha cuidado y que también ha disfrutado como él. No hay nada de malo en ello, y aunque no ha estado con más hombres aparte del profesor, tiene claro que es bisexual. Lo tiene claro desde hace tiempo, sin embargo, aunque se ha sentido atraído por otros hombres, no ha estado con ningún, solo con Javier.

Y si, él siempre ha pensado que tener relaciones sexuales es lo más natural del mundo, sean heterosexuales o no. Pero a pesar de eso, él también tiene miedos e inseguridades, y su primera vez con un tío era importante, no quería ligar y follar con cualquiera, como lo hace cuando una mujer le gusta. Era como una barrera, porque no es lo mismo hablarlo o saber del tema, que hacerlo. Primero necesitaba más confianza y más seguridad, y ahora sabe que de a poco va a conseguirla.

Está satisfecho con su experiencia, de que haya sido con alguien que le quiere, pero sabe que sexualmente todavía le quedan cosas por experimentar, por sentir. Porque follar con tías o llegar hacerlo con otros tíos, si, está muy bien, pero hacer el amor debe ser la mejor sensación de todas.

En el fondo duda de que alguna vez pueda hacer el amor, porque nunca se ha enamorado, no ha tenido una pareja como sus amigos, y eso le llena de miedo ¿Cómo puede pensar en hacerle el amor a alguien si ni siquiera sebe qué es el amor? Si nunca lo ha sentido, y sus amigos muchas veces se lo han recordado. Porque Agoney disfruta, folla, no le gusta el compromiso y sus sentimientos siempre han quedado fuera de cada encuentro que ha vivido. Y él no lo ve mal, nunca lo había visto mal, pero ahora que lo piensa, le da terror. Le da terror que llegue el día en que tenga a esa persona especial a su lado y no sepa amarle como merece.