Se elevan por el aire, Rin sujeta fuertemente a su querido amo, siente temor, pero no por el hecho de volar sobre el dragón, tampoco por el contacto con él, sino por desconocer que le espera a su llegada al palacio... Una vez en las alturas no logra ver palacio alguno en esa montaña, se siente un poco confundida por el momento... Una barrera en el aire se abre... Ingresan dentro... Es entonces que un gran territorio se revela ante ellos.
Un enorme palacio, un gigantesco jardín, grandes campos con obstáculos y armamentos, hay una gran roca de la cual nace un caudaloso río... Los ojos maravillados de Rin no alcanzan a acaparar todo lo que hay en aquel gran lugar... Algo hace que enfoque su atención en un solo punto. Se escuchan trompetas sonar y cientos de demonios se reúnen ante un gran camino. Seguramente el señor Sesshomaru tendría que caminar por ahí, mientras ella... ¿Qué hará Rin ahora?.. Todos los demonios que se encuentran abajo observan atentamente en aquella dirección. Rin está verdaderamente nerviosa. Se oculta tras la espalda de Sesshomaru, como si de esa forma pudiera ocultar su presencia de todos los demonios que hay en ese lugar.
Descienden al fin. Sesshomaru baja y extiende su mano a Rin. Con una sonrisa que no logra ocultar su temor, ella acepta su mano y desciende. Un demonio se acerca a recibir las riendas del dragón para llevarlo al establo.
Demonio: Permítame señor... Sesshomaru. (Se aleja varios metros llevando a Ah-Un consigo).
Rin: ¡¡Ay no!!
Jaken: ¿Qué?
Rin: Mis cosas.. Las lleva Ah-Un.
Jaken: (Se va corriendo tras él) ¡¡Oye!! ¡¡Espera!! ¡¡El equipaje de Rin!!
Al acercarse aquél demonio, hizo una reverencia ante Sesshomaru, y a Rin la vio de forma extraña... No puede evitarse sentirse mal ante el hecho de ser humana, seguramente era por eso... Todos se arrodillan ante la presencia del gran Sesshomaru, ella los observa... Parecen tenerle mucho respeto, después de todo, en algo no había mentido el señor Jaken: él era alguien muy poderoso e importante... Una voz se escucha.
Aki: ¡¡Soldados!! ¡¡Demos la bienvenida a nuestro gran y poderoso Lord Sesshomaru!!
Con su cabeza reclinada en señal de respeto, muchos giran su vista, tanto como les es posible, hacia donde Sesshomaru se encuentra, y es que perciben aquel aroma humano... Además no es sólo eso, varios se dan cuenta de que viene acompañado, y se trata del mismo aroma que ha estado impregnado en sus ropas cuando el sale del palacio.. están confundidos. ¿Era esa mujer a la que él frecuentaba? ¿Por qué la llevaba consigo? Ella era humana... ¿Cuál era el propósito del poderoso Lord?
Rin no sabe que hacer, ahora entiende por qué él le preguntó tantas veces si estaba segura de ir con él, entiende ahora por qué él le dijo que todo sería completamente diferente. Por un momento comienza a dudar... Se esconde detrás de Sesshomaru. Si pudiera huir, posiblemente lo haría en este mismo momento.
Sesshomaru: Rin.
Rin: (Angustiada) Yo.... Lo siento... No puedo.
Sesshomaru: Rin ven y camina a mi lado.
Rin lo duda, está demasiado intimidada por la presencia de aquella gran legión de demonios. Sesshomaru da media vuelta, la observa, sus miradas se cruzan en ese momento, ella etá verdaderamente asustada... No debería estarlo... Quizá él tiene la culpa por no hablarle sobre este momento, por no alertarla sobre cómo sería su llegada.. Con gran delicadeza toma el rostro de Rin entre sus manos.
Sesshomaru: Rin escúchame, no tengas miedo... Nadie va a dañarte.
Rin: (Su voz temblorosa indica que podría llorar en cualquier momento) Pero.. Es que.. Yo no soy... No soy como ellos ni como usted señor Sesshomaru.. No querrán que yo esté aquí.
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Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 3.
FanfictionEl día ha llegado. Rin ha tomado la decisión de seguir a Sesshomaru. Él la lleva a vivir consigo a las Tierras del Oeste para protegerla de una nueva amenaza... Rin ya no es la misma niña que viajó a su lado algunos años atrás. Es inevitable, no pen...