Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 3.

62. ¿Dónde está Rin?

"A cada día le bastan sus temores y no hay por qué anticipar los de mañana".

Una intensa niebla cubre a Sesshomaru y Keiko, esta vez es mucho más espesa que la inicial y parece que no acabará nunca... No es todo... Varias siluetas negras danzan alrededor de ellos con gesto macabro y sonrisas perversas... Sesshomaru desenfunda a Bakusaiga por si acaso fuera necesario hacer uso de ella. 

Keiko se siente algo temerosa, no es para tanto, pero esas sombras le traen malos recuerdos.... Recarga su espalda contra la de Sesshomaru y desenvaina su espada... Las sombras giran con mayor velocidad y ellos parecen estar dentro de un remolino de espectros... Pasan varios minutos, quizás horas... Con su voz temerosa le habla a Sesshomaru.

Keiko: ¡¡Sesshomaru!! ¡¡No te separes!! ¡¡Tengo miedo!!

Sesshomaru: (Bufa, molesto) No seas ridícula. ¿Cómo puedes tener miedo de esto?

Keiko: ¿Y si nos hacen daño?

Sesshomaru: No tienen intención de tocarnos Keiko.

Keiko: Aún así, me causan temor...

De repente, una de esas sombras se posa frente a ella, poco a poco toma forma de un rostro... Lo reconoce... Es el rostro de su padre, viéndola fijamente con el desprecio de siempre para inmediatamente soltar una carcajada llena de burla... Sin poder luchar contra ese temor, da media vuelta y se abraza fuerte a Sesshomaru.

Keiko: ¡¡Está aquí!! ¡¡Sesshomaru!! ¡¡No dejes que me toque!!

Sesshomaru: Nada es real Keiko.

Keiko: (Voltea a ver hacia atrás) Me ve igual que siempre.. ¡¡Me odia!!

Sesshomaru: ¿Quién? Somos muchos los que te odiamos.

Keiko: (Comienza a llorar) Se ríe de mi otra vez...

Sesshomaru: ¿Tu padre?

Keiko: Si...

Sesshomaru: Deberías ser tú quien se ría de ese bastardo... Eres más fuerte de lo que él mismo imaginó ser.

Keiko: Si...

Sin soltar a Sesshomaru, Keiko voltea a ver esa imagen, desafiante, orgullosa de ser quien es ahora... Ojalá fuera real... Y en ese mismo momento le haría pagar todas las humillaciones que le hizo pasar a ella, a su hermana y a su madre... ¡¡Todo por no haber dado a luz a dos hijos varones!!

Ese temor, gracias a las palabras de Sesshomaru, se ha convertido en el coraje necesario para enfrentarlo... Con gallardía y seguridad en su corazón, su mirada desafía esa aparición que poco a poco se desvanece... Era ese temor de ella lo que les impedía salir de ese lugar.

Un fuerte movimiento se siente ahora, en esta ocasión Keiko se aferra verdaderamente con todas sus fuerzas al cuerpo de Sesshomaru. No es agradable que sea esa mujer quien lo abrace de esa manera... Pero no hay opción... No pueden separarse... Deben salir ya de ese maldito lugar... Debe reunirse con Rin inmediatamente.

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Rin ha estado ausente por ya casi tres horas, cosa que comienza a preocupar a Takeshi, quien desesperado, camina de lado a lado de aquella habitación.

Jaken: (Estresado) ¡¡Ya siéntate Takeshi!! ¡¡Me desesperas!!

Takeshi: Disculpe señor Jaken pero es que...

Bingo: ¿Que tienes muchacho?

Takeshi: Yo... La señorita Rin ya se ha tardado.

Aki: Se habrá quedado dormida tal vez.