Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 3.

19. Rin sintió miedo.

Toman sus alimentos en completo silencio, puede sentirse una fuerte tensión en el ambiente. Rin ha comido muy poco y parece que no tiene deseos de alimentarse más. Al dar Sesshomaru la indicación de que se recoja la mesa todos se ponen de pie para retirarse, Rin se adelanta para sorpresa de todos los presentes. Camina rápidamente hacia la puerta, está a punto de salir de esa habitación.

Sesshomaru: ¡Rin!

Rin detiene sus pasos, esa voz firme y severa, esa voz que tantas veces deseó volver a escucharla pronunciando su nombre, ahora le provoca una sensación extraña. El tono de su voz es distinto. ¿Qué debe hacer? Sabe que muy probablemente él está molesto con ella. La tarde anterior intercedió por Takeshi, esta mañana había presenciado una terrible escena. ¿La regañaría acaso?

Son unos cuantos segundos que parecen eternos para todos, pero especialmente para ella. Rin ve hacia el suelo tratando de tomar una rápida decisión... ¿Debe quedarse? ¿Debe marcharse?... Su mirada fija en el suelo ahora se posa en sus pies... No se había dado cuenta que estaba descalza. Otra de sus inapropiadas manías.

Su corazón late más a prisa por cada segundo que transcurre. Pasa saliva con dificultad. Inhala profundamente, exhala despacio. Tal vez no es lo mejor, pero es lo que su instinto le pide hacer en ese momento... Decide ignorar el llamado de Sesshomaru y sus pasos vuelven a ser veloces.

Sólo desea alejarse de ahí lo antes posible. Sabe a dónde dirigirse, sólo quiere estar sola por un rato, procesar lo que vio entre Sesshomaru y Fuji... No desea volver a su habitación por el momento... El jardín es el mejor lugar para estar un rato a solas, sabe que en este momento Sesshomaru se reunirá con los comandantes, y que además, todos tienen prohibido el acceso al jardín, nadie la molestará en ese lugar. 

La tarde anterior se sintió triste por el cambio tan repentino en el ánimo de su amo Sesshomaru, entendía que era porque ayudó a su nuevo amigo a librarse de un castigo seguro, deseaba disculparse, pero no quería que él fuera tan severo con el joven y lo regañara o castigara por culpa de una tonta petición de ella. 

Por la mañana al verlo salir de su habitación con ese rostro lleno de enojo sintió algo de temor, sus ojos jamás la habían visto de esa manera... Y ahora, verlo amenazando a Fuji, con palabras cargadas de rabia y odio, esta vez, no lo pudo evitar, sintió miedo de él... 

Y es que Fuji parecía ante los ojos de Rin ser una buena muchacha, incluso ya la consideraba su amiga... Estos días que Sesshomaru estuvo ausente, Fuji la había acompañado en el salón, escuchando las melodías que tocaba Takeshi. Incluso ella, le había enseñado algunos pasos de baile... Además, en algunos tramos de recorrido por el palacio, conociendo cada espacio, ella también estuvo caminando a su lado, compartiéndole algo de información. 

Estaba muy confundida... ¿Por qué su amo Sesshomaru se comportaba así? ¿Era culpa de ella?... Tal vez era por completo su culpa al interceder por Takeshi. Pero.. ¿Por qué amenazaba a Fuji de esa manera? Sin importarle que ella llorara o suplicara... Rin sintió miedo en ese momento, y no podía evitarlo, deseaba estar alejada de él, al menos por ahora. Necesitaba un par de horas lejos de él y de todos para procesar esa imagen que no se apartaba de su mente.

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Todos observan callados e impresionados lo que ha hecho Rin... Se ha atrevido a ignorarlo, al poderoso Lord, al mismísimo Sesshomaru. 

Keiko aún la detesta, pero con esa acción se ha ganado un poco su respeto, al menos por ese momento... Ignorar a Sesshomaru requiere mucho valor. No es seguro vivir para contarlo.