RESET (NCT-T/N)

17

—¿Sangre? — repitió ella mientras tocaba arriba de sus labios, no sería la primera vez que le sangrara la nariz.

—No, no, ahí no. — dijo Renjun, inmediatamente señalando un poco más abajo.

La mandíbula de ____ calló y desvió la mirada de los ojos del muchacho. Después de eso, lo único que pudo hacer es regresar al lugar en donde había pasado toda la tarde sentada y comprobar el desastre que acababa de hacer.

Renjun lentamente bajo los dos escalones que le quedaban y se dirigió al mismo lugar de ella, pero con sus cortos pasos, para cuando llego a ver la mancha roja sobre el sofá, ______ ya estaba corriendo al baño.

🥀

—¿Estas bien? — preguntó Renjun después de tocar la puerta del baño.

—Sí. — afirmo _____ desde el otro lado.

—No te preocupes, es solo sangre. —trato de aligerar el ambiente... pero a ______ no le dio gracia el tono que uso. — ¿Te duele?

—No. —respondió de inmediato. — ¿Por qué debería dolerme? No es como si estuviera muriendo ni nada.

—E-está bien... Dime si necesitas algo... — dijo, por último, dando lento y pequeños pasos ya que estaba esperando que ella respondiera.

—En realidad... hay algo que necesito.

De un salto, el oído del muchacho se pegó a la puerta.

—Dime, te lo conseguiré.

—Unas toallas higiénicas.

—¿C-con alas? — fue lo único que se le ocurrió al muchacho para decir.

—Con alas, de malla y regular. — agrego ella, después de echar memoria por unos minutos lo que le habían enseñado en la empresa.

Renjun repitió unas cuantas veces lo que _____ le había dicho.

—Está bien, no tardo. — dijo para ponerse en marcha.

La situación, la vergüenza y las hormonas del momento habían provocado que en ese momento el rostro de la muchacha se encontrara más rojo que la mancha que había dejado e el sofá, por suerte Renjun no la había visto así.

🥀

Cuando Renjun bajaba en el ascensor, en su cabeza planeaba lo que haría; cuando toque tierra, saldría por la entrada principal y de frente a la tienda de convivencia más cercana.

Todo estaba listo, no sería difícil, pero cuando las puertas del ascensor se abrieron, alguien se interpuso entre él y su objetivo.

—¿Mark?

—¿Renjun-a? — el muchacho de cabello negro había llegado a casa. — ¿Qué haces aquí abajo?

—No... ¿de dónde vienes? — preguntó curioso.

—Vengo de grabar con Xiunmin sunbae, él es muy gracioso. —agrego con una sonrisa.

—¿Grabar?

—Bueno, es un station... pero aún no me respondes a dónde vas.

Renjun se puso un poco nervioso.

—¿Ya subirás? Si no, acompáñame, iré a comprar unas cosas.

—¿No hay nadie en casa?

—Todos han salido.