Capítulo 31

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Laura se asustó al ver la reacción de Esteban. Trataba de tranquilizarlo, pero no podía.

- ¡Ya cálmate! ¿Quién era?

- Era el asesino. Volvió a decirme que el próximo sería yo.

- ¡Dios mio! Ya ven. Tranquilízate. Nada va a pasarte.

Carlota y Luz llegaron a la mansión de los Palacios.

- Hermano, ¿Qué pasó? ¿A quién mataron?

- Mataron a Estefany. La hallaron muerta en el sótano.

- Pobrecita niña, dijo Luz asombrada.

- Y ¿Cómo está nana?

- Está destrozada.

- Voy a verla.

Axel estaba en la estación policial. Se encontraba inmerso en un laberinto. Era la segunda muerte y aún no había podido capturar al asesino.

- No podemos permitir que hayan más muertes.

- Si jefe. Hay que tener esa casa vigilada día y noche si es posible. Dijo Andrés.

- Claro que si, y tú te encargarás de eso, obviamente con otros policías más. Ese asesino no se burlará de nosotros.

Carlota vio a Carmen. La abrazó fuertemente y comenzaron a llorar.

- ¿Por qué nos pass esto? Mi niña era tan buena. No merecía morir de esta forma. Yo me quiero morir con ella, no quiero vivir.

- No nana, no digas eso. Todos estamos contigo, no te dejaremos sola en esto. Ven, dame un abrazo.

Laura llamó a Axel para contarle de la llamada que recibió Esteban. Axel le dijo que no se movieran de donde estaban, que él ya iba saliendo a verlos.

Esteban, por su parte, estaba pensativo, reprochando el momento en el que aceptó involucrarse con la familia Palacios. Pero al ver todo lo que Laura hacía por él, le agradeció.

En su escondite, el asesino estaba observando una foto de Estefany, la cual empezó a quemar, simbolizando de esa manera su muerte. Luego sacó una foto de Esteban, la colocó en la mesa y le clavó un cuchillo.

Horas más tarde, Axel se encuentra con Laura y Esteban. Les preguntó cómo era la voz de la persona que lo llamó, pero Esteban dijo que era imposible reconocerla, puesto que estaba distorsionada. 

Axel, le dice que la única solución es intervenir su teléfono celular para rastrear la llamada, si es que vuelve a hacerlo.

Hugo le lleva un te a Carmen. No quería nada, ni siquiera había comido algún alimento desde que vio a Estefany muerta. Ella solo decía que quería morirse también.

Carla estaba en su habitación con Paula. Le cuenta que Estefany iba a tener un hijo de Isaac y de lo feliz que está de que ella haya muerto. También le dejó claro que no soporta las traiciones.

- Espero que tú nunca me traiciones Paula.

- Claro que no. Como crees amiga.

Paula se puso nerviosa y pensó: ¡Dios mio! Ojalá nunca se entere que yo tuve algo con Isaac.

Julia y Fidel discutían si ir o no al velorio de Estefany.

- Yo creo que no tenemos nada que hacer en ese velorio. Y menos si es de la servidumbre.

- Pues, yo si iré, por protocolo por supuesto.

- Yo no iré, y menos de esa sirvienta.

- Bien. Nos vemos luego querida.

Luciano llega al velorio y le da el pésame a Carmen. Carlota al verla tan mal le dice que vaya a descansar unas horas, pero Carmen se reusaba a hacerlo.

- No mi niña. Yo me quedaré aquí con ella hasta la último. No la dejaré solita.

Laura iba casi saliendo a la capilla donde estaban velando a Estefany, pero antes le dice a Esteban que no le abra la puerta a nadie. Esteban le dice que no se preocupe, que no le abrirá a nadie.

Al salir, el asesino observaba desde a Laura, esperando que se alejara más para ir en busca de Esteban y asesinarlo.

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