El Precio del Silencio

Capítulo 18

Paula, intrigada le pregunta a Carla dónde se había metido Isaac, pues tenía horas sin verlo. Carla, se da cuenta y empieza a mirar todas las mesas, pero no lo ve.

- Qué sucede hija? Preguntó Manuela.

- Isaac anda perdido. Voy a buscarlo, respondió Carla mientras se disponía a buscar a Isaac.

Hugo, se acerca donde estaba Anselmo, y le pregunta si había hecho lo que le pidió.

- Si, señor. Todo salió como lo planeamos, respondió Anselmo.

- Perfecto! Manuela sufrirá muchísimo, dijo Hugo.

Los demás invitados disfrutaban de la fiesta, entre ellos Luis Alberto y la Doctora Luz.

- Ven, bailemos esta pieza, le pide Luis a Luz.

Luz no aceptaba, diciéndole que casi no sabe bailar, pero al final la convenció y terminaron bailando.

Julia, sentada en una de las mesas, tomaba champán.

- Vaya, al fin volviste. Tardaste mucho, le dijo a Fidel quien iba llegando a la mesa.

- Si, es que me encontré a varios conocidos, y pues, me quedé platicando, respondió Fidel.

Julia, se da cuenta que Fidel tenía el nudo de la corbata desordenado.

- Por Dios! Mírate, pareces un niño con esa corbata así, ven y te la arreglo, dijo Julia.

- Es que hay mucho calor y me fastidia. Ya quiero irme, respondió Fidel, quien miraba a todas partes.

Mientras tanto, Carla y Paula seguían buscando a Isaac.

- Lo encontraste? Preguntó Carla.

- No amiga. Vamos a su cuarto, seguro está ahí, propuso Paula.

- Si. Vamos, y ojalá no sea lo que me estoy imaginando, dijo Carla.

Carlota, algo molesta le reclamaba a Dario.

- No sé para que me pediste que estuviera contigo en la fiesta. Haz pasado toda la noche desaparecido, dijo Carlota.

- Estaba socializando con los medios y los empresarios querida, tú sabes.... Las relaciones públicas, cosa que tu hermano no ha hecho, respondió Dario.

- Ya va! Y ese rasguño que tienes en el cuello? Preguntó Carlota.

Dario, algo nervioso le contestó que seguramente se lo hizo cuando se rasuró. Carlota lo miró con desconfianza, pues no le creyó.

Luis Alberto y Luz seguían de bailando. Él le decía que bailaba muy bien, pero ella insistía en que no sabía, y que tenía dos pies izquierdos, por eso nunca le gustó bailar.

- Sólo déjate llevar, escucha la música y concéntrate, le dijo Luis.

- Es que... Tenerte tan cerca me pone nerviosa, respondió Luz.

Se miraron fijamente y tras unos segundos se besaron.

Carla y Paula entran a la habitación de Isaac. Todas las luces estaban apagadas.

- Isaac? Estás aquí? Preguntó Carla.

- Amiga, yo creo que aquí no está, llámalo de mi celular, toma, dijo Paula.

Cuando Carla llama, escuchan que el celular sonaba dentro de la habitación, específicamente del baño.

- Que raro. Escuchas eso? Dice Carla.

- Ay Carla, ya me está dando miedo, dijo Paula.

Entran al baño, y se dan cuenta que era cierto, el celular estaba ahí. Ven que la luz del celular alumbra la bañera 🛀, la cual tapaba una cortina.

Carla, toma la cortina, comienza a rodarla poco a poco, al abrirla completa ven el cadaver de Isaac.

Carla dejó el celular y empezaron a gritar como locas.

- Noooo! No puede ser! Nooo! Isaac noooo! Gritaba desconsolada Carla.

- Dios mío no puede ser! Tengo que avisarles a todos! Dijo Paula, quien salió corriendo a avisar lo sucedido.

Paula llega al jardín dando gritos, desesperada.

- Auxilio! Auxilio! Hay un muerto! Isaac está muerto! Gritó Paula.

La musica dejó de sonar y todos salieron corriendo, alarmados siguiendo a Paula a ver que sucedía.

La primera en llegar a la escena fue Manuela.

- Hija! Qué pasó? Dios mío! Que espantoso! No puede ser! Quién hizo esto? Por qué lo hicieron? Decía Manuela.

Carla estaba en crisis, lloraba desconsoladamente.

- Mamá, Isaac está muerto! Cómo pasó esto? Dios mío!

- Ven hija, salgamos de aquí, le dijo Manuela sacándole al pasillo.

Llegó Esteban, primo de Isaac a ver que pasaba, y para su sorpresa vio a su primo degollado.

- Dios! Primo!

Laura, lo escuchó y le preguntó:

- Cómo dijiste? Él era tu primo?

Esteban, aún en shok, se va sin dar explicaciones.

Todos estaban asombrados por lo que había sucedido.

- Señor Hugo, ya llamé a la policía, dijo Anselmo.

- Gracias Anselmo. Que lamentable. Carla debe estar destrozada. Por favor, necesito que todos desalojen la habitación, esto es la escena de un presunto asesinato o suicidio, salgan por favor, pidió Hugo.

Luz, estaba tratando de calmar a Carla dándole unos calmantes para sedarla, pero Carla se rehúsaba a tomarlos.

- No quiero nada! Por qué me pasa esto a mi? Ese hombre, hugo, trajo la desgracia a esta casa. Lo odio! Decía Carla llorando.

- Luz, ella tiene que dormir o sino es capaz de cualquier cosa, está muy alterada, dijo Manuela.

- Si. Preparen un te, y ahí le pondré el calmante para que duerma, sugirió Luz.

La policía llega al cabo de unos minutos.

- Ok. Necesito tomar las declaraciones de todas las personas que viven en esta casa, dijo el detective Axel Polanco.

- Detective! Mire, encontré esto en la escena del crimen, dijo Andrés Ríos, un policía.

Era una máscara de payaso llena de sangre.

- Una máscara de payaso? Que significa eso? Se preguntó Axel.

Laura se quedó preocupada por la reacción de Esteban.

- Esteban estaba muy raro Rosa, cuando vio el cuerpo de Isaac, lo llamó primo, que te parece? Dijo Laura.

- En serio? Amiga no será que son familia y te lo ocultó ? Preguntó Rosa.

Axel estaba interrogando a Manuela.

- Dígame señora, tiene algún sospechoso de la muerte de este joven, o usted cree que fue un suicidio?

Manuela contestó:

- Si detective, mi sospechoso principal es mi esposo, Hugo Palacios.