No pasa nada Nat

7.9K 410 72
                                    

POV ALBA

- ¿Qué haces aquí?

- Venir a verte.

- Pero Alba te dije que - apareció Santi.

- La he avisado yo - se acercó a mi - hola Alba - me dio un beso - pasa.

Entré con ellos al salón y no parecía haber nadie más en la casa.

- ¿Por qué la has avisado? - le preguntó Natalia a Santi.

- Pues porque necesitas que esté aquí.

- Santi.

- Natalia - se miraban serios. Sin decir nada más, y la verdad, no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Natalia estaba tan guapa como siempre, pero no tenía buen aspecto. Se la veía cansada. Santi seguía siendo el mismo, aunque sus ojeras hablaban por si solas y su barba desaliñada también. De repente Natalia se echó a llorar llevando sus manos a su cara y yo me acerqué a ella abrazándola. Santi nos miró y salió por la puerta dejándonos solas.

- ¿Qué pasa mi amor? - le pregunté pero ella solo lloraba, no hacía otra cosa - venga Nat, tranquila por favor - le cogí la cara con las dos manos y traté de tranquilizarla - estoy contigo - le sonreí esperando que, realmente, eso fuera algo positivo. Ella me miró calmando el llanto - ¿es por tu madre? Puedes decirme lo que sea Nat.

- ¿Te acuerdas de lo que te dije que evitaba al venir aquí? - dijo de golpe. Joder. Claro que me acordaba. Y no se cómo no se me había ocurrido antes.

- Si, me acuerdo.

- Pues no lo he podido evitar.

- No pasa nada Natalia - le cogí la mano - no tienes por qué esconderte.

- Es que si tengo por qué - se echó a llorar de nuevo y me abrazó.

- Nat... - me preocupé. La vi derrotada. Estaba completamente hundida. Algo tenía que haber pasado con Sofía o su entorno que la había dejado como nunca la había visto.

- Lo siento Alba - dijo entre sollozos - lo siento muchísimo.

- Natalia por favor - la separé de mi para mirarla - me estás asustando. Dime qué te pasa.

- Es Sofía, ella - cogió aire - la vi el otro día.

- Vale. Ven Nat - la arrastré hasta un sofá y me senté con ella - vamos, háblame. Estoy aquí.

- Me dijo lo que nunca me había dicho. Los años han debido aumentar su rencor hacia mi. Fue tan dura conmigo - se llevó las manos a la cara - sabía que le había hehco daño, pero verla con tanta ira hacia mi, diciéndome todas esas cosas, culpándome de su tristeza a la cara... no pude decir nada. Solo me quedé paralizada, escuchando lo que tenía que decirme, como si fuera una estatua.

- Nat no pasa nada. Ella necesitaba soltarlo, pero ha elegido el peor momento para hacerlo la verdad, eso no está bien.

- Lo que no está bien es lo que yo hago.

- ¿A que te refieres?

- A hacer daño a los demás - dijo quitando la mirada de mis ojos.

- Tú no haces daño a nadie Natalia. No quiero que pienses eso, ¿me escuchas? - me miró - ¿vamos a dar un paseo? Creo que nos puede venir bien a las dos.

- No Alba, no quiero salir - negó con la cabeza.

- Natalia, no puedes estar encerrada todo el día.

- No quiero Alba - lloró de nuevo - por favor - verla tan destrozada me estaba partiendo el corazón. No sabía cómo ayudarla, cómo hacerla ver que no tenía que estar así, que tenía que seguri adelante. Pero estaba tan rota, que no podía hacer nada, así que solo le abracé otra vez mientras me echaba a llorar.

Todo lo que te quitaron // ALBALIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora