ʜᴇᴀʀᴛʙʀᴇᴀᴋᴇʀ | 𝙇. 𝙃𝙚𝙢𝙢𝙞𝙣𝙜𝙨

I Did Something Bad

Así fue como volví a donde todo había comenzado.

Era la amante de Luke, pasé a ser la oficial y ahora me había denigrado a ser su polvo de vez en cuando.

Supongo que me lo merecía, tampoco era como si me sintiera mal al respecto, de hecho me gustaba acostarme con él sin ningún tipo de ataduras, aunque mi celopatía no podía soportar el hecho de verlo paseándose por la escuela con su nueva "novia" o eso decía ella.

Pobrecita.

Al menos Leslie Michaels era una digna adversaria, era hermosa, pero básica, justo el tipo de chica que a él le gustaba. Su sonrisa arrogante cada vez que me veía era la cosa más molesta, pero no dejaba hacerle saber que me importaba, yo también sabía jugar a ese juego.

Su peor error fue haberme dicho que me amaba, porque eso me daba la confianza suficiente para molestarlo. Si él no se hubiese confesado, quizás me habría dado por vencida desde hace tiempo, pero el hecho de saber que era la única que lograba descolocarlo me hacía sentir empoderada.

Me encontraba en el gimnasio, sentada en una de las banquetas, revisando mis redes sociales mientras las animadoras practicaban, nunca terminaba de practicar una rutina completa, me aburría a la mitad,me sentaba en la banca y agitaba los pompones de vez en cuando.

Tampoco era como si las chicas fueran las mejores animadoras del mundo, estaban descoordinadas, algunas no sabían ni moverse, era demasiado gracioso verlas perdidas en medio de una coreografía y cuando se tropezaban y caían era la mejor parte.

La única función del equipo era verse bien en los uniformes.

—Lo siento, no puedes estar aquí durante los ensayos.—dijo Mandy y aparté la vista de mi teléfono para ver de qué se trataba.

—Está bien, Mandy, viene a verme.—dije en defensa del chico y le hice señas con mi brazo para que se acercara.

—Bueno, si vienes por Venus, puedes pasar.—Ashton le sonrió pero cuando la chica dejó de mirarlo borró la sonrisa y le hizo una mueca causándome risas.

—¿Trajiste lo que te pedí?.—pregunté una vez se sentó a mi lado, asintió.

—Fue difícil, Luke es demasiado desconfiado.—sacó las llaves de su bolsillo y las dejó en mis manos.

Eran las llaves de la motocicleta de Luke, sonreí mirando aquel objeto en mi mano y escuché a Ashton reírse.

—Cuando tienes esa mirada, me asustas.—guardé las llaves en mi brasier y reí mirando hacia su dirección.

—Gracias, por ayudarme, eres el mejor, no sé porque te la pasas tanto con Luke.

—Es un buen amigo.—sonrió mientras observaba la práctica de las animadoras.—Pero es un idiota con las chicas y por eso te ayudo.

—¿No te caga saber que él en el fondo es una buena persona y actúa como cretino para impresionar...a quien sabe quién?.

—Mucho...no quiere verse débil, supongo.—se encogió de hombros.

—¿Quien lo lastimó tanto para que haya desarrollado esa personalidad tan horrible?.—suspiré inclinándome hacia atrás y apoyé los codos de las bancas de arriba mientras observaba a las chicas.

—Quizás una chica lo traicionó y ahora es así, no lo sé.

—Quizás...—asentí lentamente, miré la hora en mi teléfono y me levanté de la banca.—Ven, ayúdame antes de que termine la ultima hora.—tomé su mano ayudándolo a levantarse y comencé a caminar fuera del gimnasio.