¿De Quién Es El Destino?

Cap 1

Dentro de aquella enorme residencia bañada con alegres colores y un ambiente cálido sólo eran dos personas; más específicamente, dos personas y un perro. Jun Wu era un padre responsable desde que Xie Lian nació, entregando todo de él para su bienestar, y tuvo que esforzarse más cuando su esposa murió, dejándolos a ambos en la soledad. A pesar de eso, Jun Wu amaba a su hijo, tanto como para darle la vida que el hubiese querido tener.

Trabajaba la mayor parte del tiempo en una exitosa empresa como el mejor hombre de negocios; un padre ejemplar que protegió a su hijo contra mil mareas. Y aunque a veces se sentía amargamente solo, nunca lo demostró, ni para él, ni para el pequeño niño.
Ambos llevaban una acomodada vida en Inglaterra, con vecinos amables y un entorno pacífico donde el chico pudo crecer fuerte y sano. De vez en cuando soñaba con que su hijo encontraría al amor de su vida; una mujer noble y hermosa, y formaría su propia familia con la que serían feices. Claro, muy en el fondo realmente quería que ese momento tardara mucho en suceder; como todo padre que atesora a sus polluelos.

Xie Lian ya tenía 20 años, y era un estudiante universitario dedicado y muy competente. Jun Wu se sentía tranquilo al pensar que su hijo sería tímido con las chicas. Estaba muy tranquilo...

Por otro lado, el amigo de su hijo, Qing Xuan era confiable. Juntos nunca se meterían en problemas. Incluso llegó a tenerle tanto cariño que lo trataba como un miembro más de su pequeña pero acogedora familia.

-- Padre, no deberías trabajar demasiado -- Le dijo Xie Lian a Jun Wu mientras bebía un vaso de leche, en una fresca mañana de lunes en el desayuno. Al escucharlo, se llenó de ternura. Especialmente al recordar bellos momentos cuando todavía eran tres, y caminaban juntos bajo la luz del sol en el parque, siendo las personas más felices sobre la Tierra. Efímeros fragmentos de una vida perfecta.

-- Estoy bien. Ya me he acostumbrado, de hecho me gusta. Y tú hijo, ¿qué hay de la escuela?

-- Sin cambios.

Jun Wu temió al dejar salir la siguiente pregunta, pero igual sintió que tenía que hacerla. Era una pregunta casual después de todo.

-- ¿Alguna linda chica que te guste? Tienes compañeras muy bonitas.

-- ...

Una taza de café se posó sobre la mesa, el silencio inundó aquella mañana, los labios color durazno del chico se tensaron, había incertidumbre en el aire. El padre sonrió esperando un "no" como respuesta. O tal vez "no es tiempo para eso".

-- ... hay alguien.

Jun Wu quedó perplejo ante la respuesta... sin embargo, esperó por las siguientes palabras del príncipe. Xie Lian desvío la mirada sonrojado, hacia la ventana del comedor, poniendo especial atencion en las rosas color carmín que dormían en el jardín, de colores tan vivos y salvajes.

-- Aunque no es una chica...

-- ...