Annette es una joven que ha sufrido mucho, no solo había perdido a sus padres y su hermana pequeña en un accidente de coche sino que además debía empezar de nuevo en un lugar desconocido para ella. Forks.
Tendría que irse a vivir con su tía Charlot...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El mes de Noviembre fue extraño porque Anne noto un cambio en los Cullen. Nadie más parecía darse cuenta de aquello. Alice ya no se sentaba a su lado en clase de Arte, pero desconocía la razón. Seguía saludándola, y la única excusa que ponía para su cambio de actitud eran "problemas en casa". No sabía si creer o no en su palabra, solo sabía que verla triste era extraño. Ella era tan alegre y extrovertida, que verla así era raro.
Al acabar las clases de arte, Anne se acercó a Alice. La consideraba su amiga y como tal, si no podía contarle algo al menos intentaría animarla.
-Alice, ¿te gustaría venir conmigo de compras? -Anne conocía la emoción de Alice por las compras y esperaba que aquello la animase.
Alice miró confundida a Anne.
-No me gusta verte triste, y si tienes problemas en casa quizá debas despejarte... No sé piénsalo, puede venir Rosalie si quieres y yo invito a mi hermana.
Alice hubiese llorado si pudiese. No podía enojarse con alguien tan puro, inocente y bueno. Sonrió, aunque fue una sonrisa triste y asintió.
-Iré a recogerte después de clase -dijo Alice.
En clase de gimnasia, el entrenador avisó que los llevaría a una maratón que estaba en Seattle. Todos estaban emocionados, iba a ser en diciembre después de los exámenes. Aquello explicaba la insistencia por entrenar del profesor...
Después de clase, Evelyn y Anne se fueron a casa donde comieron con su tía Charlotte. Allí empezaron a contar sus planes. Anne se iría de compras con Alice y Evelyn iría a la Push con Jessica, Mike y más gente que Anne no conocía. No sabía en qué momento su hermana había hecho nuevos amigos, pero se alegraba.
Al otro lado de Forks, Alice se enfrentaba a su propia familia. Edward no entendía porque seguía teniendo contacto con aquella chica si la hacía sufrir. Rosalie opinaba que la culpa no era de la humana, sino de Jasper. Él lo llevaba peor. La relación con Alice iba mal, no sabía qué hacer. No imaginó que un baile ocasionaría tanto problema. Sentía culpabilidad, pero no arrepentimiento.
Pero no era lo que Jasper había hecho sino lo que Alice había visto. Lo había visto, a él, a la persona que sería su eterno compañero y no era Jasper. Aquello fue más duro para ella que para cualquiera. Ver a Jasper bailar con Anne y su visión, le hizo ver que el más perjudicado en todo aquello era él.
Alice se había visto siempre con Jasper y había dado cosas por hecho que no eran así. Ahora veía una situación distinta. Pero la culpa no era de nadie, quizá de sí misma por pensar de otra manera y confundir a Jasper. Ahora solo quería que él fuese feliz, pero hacerlo comprender sería difícil.
Carlisle intentaba calmar la situación, si Alice tenía un futuro con otra persona era su decisión, por muy dolorosa que fuese. Jasper se sentía devastado, sabía que no podía parar a Alice. Le debía mucho y aunque el sentimiento seguía ahí, siempre desearía lo mejor para ella. Siempre buscaría su felicidad, solo... él nunca imagino que no sería con él. Las emociones en la casa eran demasiado para él, así que solo pensó en salir, correr por el bosque... Emmett fue con él, en un momento delicado como aquel podía cometer cualquier locura. Todos sabían que solo hacía falta tiempo.
