29 "¿La felicidad?"

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Vicenta

-Buenos días-Digo con una sonrisa en mi rostro.

-Buenos días acerita.-Me dice en un tono dulce y me lo imagino sonriendo mientras se toma su típica taza de leche con café.

-Quisiera saber si hoy me podrías acompañar a mi departamento,es que estoy teniendo unas dudas y líos con unos casos,y tú siempre me ayudas a saber que hacer,eres la mejor en eso.-Me dice y noto que esta algo nervioso como si me fuera a negar a ayudarlo.

-Gracias Jack,si claro que te puedo ayudar,solo dime a que hora.- Digo tranquila.

-¿A las 4 de la tarde te parece?-Me dice y noto felicidad en su voz,lo que hace que mi corazón se encoga por ese gesto.

-Si,me parece.-Le digo suavemente.

-Entonces ¿Te paso recogiendo?.-Me cuestiona y me alegra oirlo feliz.

-No,tranquilo no es necesario,yo voy para tu casa.-Digo rápidamente.

-Esta bien acerita,te quiero,Chao.-Me dice rápidamente y yo sonrío en respuesta.

-Chao Jack y yo también te quiero-Le digo y voy a cerrar la llamda cuando lo escucho.

-¡Espera!-Me dice de repente.

-Dime-Le respondo tranquila.

-Vente un poco arreglada,porque vamos a ir a un restaurant.-Me dice y me imagino su cara pícara.

-Okay,nos vemos luego Jack.

-Chao Vicentita.

Cierro la llamada y miro el sol que entra por mi ventana, ¿Qué estas haciendo Vicenta Acero?.

El resto del día la paso feliz escuchando las anécdotas de Danielito,y como Daniel lo escucha y viendolos jugar,pasa el tiempo y caigo en cuenta que ya son las 2:30 de la tarde y me decido ir arreglar.

Me pongo un vestido crema con cuello en V,la cadena de esmeraldas,el anillo,unas sandalias,un poco de sombras cálidas que las combino con un brillo labial,me suelto el cabello,son las 3:15 y sé que Daniel me va a ver y no sé qué decirle,pero al final llego a la conclusión que la verdad es la mejor opción. Mentirle sería peor,así que me decido por la verdad. Salgo del cuarto y camino por el pasillo y los veo a lo lejos que estan jugando "UNO".

-Mami ¿a dónde te vas?.-Me pregunta Danielito mientras me ve sorprendido,si yo no suelo usar esta ropa.

-Ven para acá Danielito.-Le digo con voz calmada. Él se acerca y me agacho.

-Mami se va a una reunión de ex amigas del colegio,y demorara un ratito,tu te quedas con tu papi jugando ¿si?.-Le pregunto con una sonrisa, y el mueve la cabeza de arriba a bajo.

-Si,mami.-Me dice tranquilo.

-¿Mi beso?-Le pregunto y él sonríe en respuesta. Mi niño me besa el cachete y me regala una sonrisa.

-Chao mami.

-Chao mi vida,ahora dile a tu papi que venga y te quedas donde él esta.

-Esta bien.

Veo a Daniel acercarse y me pongo algo nerviosa.

-No te vas a ninguna reunión de ex amigas ¿cierto?.-Me pregunta con una ceja alzada y yo río nerviosamente en respuesta.

-No,eso le digo solo para que no se confunda como estoy yo.-Digo media calmada.

-Te ves hermosa.-Me dice con toda la sinceridad abruptamente, sinceridad que me golpea.

-Gracias.-Digo en voz muy baja.

-Él tiene mucha suerte-Dice con una voz dolida, sé que oculta más emociones detrás de esa frase, corta pero profunda.

-No digas eso,pues mira yo no se de que quiera hablar,pero me dijo que quería que vaya arreglada,y pues eso hice.-Digo algo a la defensiva, ¡Ay Phillips!.

-Me voy a morir de celos.-dice dramáticamente,y yo me río de su gesto.

-No digas eso pues,usted no se va a morir,Danielito lo necesita, y yo también, gringo dramático debiste ser actor mijo-Digo con una sonrisa y le doy un ligero golpe en su hombro

-Pero yo te necesito a ti.-Me dice mirándome con dolor a los ojos.

-Luego hablamos de eso, Daniel, ahora me debo ir.-Digo tratando de huir de dicha situación.

-Si necesitas algo solo llámame y recuerda que te amo.-Me dice agarrando mi mano.

-Gracias.-Le digo y salgo por la puerta.

Camino lo más rápido que puedo hacia los garajes para agarrar mi carro e irme.

Al llegar donde Jack,él me comienza a hablar de sus problemas,trato de aconsejarlo lo mejor que puedo,el restaurante es muy bonito,no es formal pero si tiene un entorno que te hace sentir en casa,para mi ayudar a Jack siempre se me ha hecho sencillo, hacemos un gran equipo juntos,por eso la comida resulta rápida entre consejos y risas que le logro sacar .Todo es más sencillo.

Cuando me voy a ir,él se me acerca y me besa y me separo rápidamente, con la excusa que quiero toser,creo que él lo noto pero prefiero evitar esa conversa, estoy muy confundida,le doy un corto beso en la mejilla y regreso a la casa como a las 6:00 de la tarde. Entro y estan viendo Coco una de las películas favoritas de mi hijo.

-Buenas tardes.-Digo entrando por la puerta de la sala, al escucharme ambos me miran con una sonrisa, se parecen demasiado.

-¡Mami!-Dice mi hijo y sale corriendo a saludarme

-¿Me extrañaste mi vida?.-Le digo cerca de su cara.

-Siii.-Me dice emocionado y abrazandome.

-Vicenta.-Dice Daniel cerca de nosotros y con una sonrisa en el rostro.

-Hola Daniel.-Le respondo dándole un saludo.

-Mami ¿Quién te dio esa pulsera?.-Me pregunta mi niño con el ceño fruncido.

-¡Oh!,esto es un viejo regalo que me lo dio una de mis amigas del cole,hace un tiempo.-Le digo con una sonrisa.

-Esta muy bonita.-Me dice mientras la toca y la ilusión en sus ojos se da a notar.

-Si mi vida,ahora anda a seguir viendo coco,que tu papi quiere hablar conmigo un ratito.

-Ya mami.-Me responde y regresa a su sillón.

Salgo con Daniel al patio,y me siento algo nerviosa.

-¿Eres feliz?.-Me pregunta él directamente y sé que esa pregunta contiene muchos sentimientos de por medio.

-Si,osea lo intento,además nuestro hijo siempre ha sido mi alegría.- Le digo con una sonrisa ladeada.

-¿Y con Jackson?¿Con él eres feliz?.

[1] Cenizas de un lazo de Acero [Señora Acero: la Coyote]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora