[1] Cenizas de un lazo de Acero [Señora Acero: la Coyote]

51 "Sarcasmo"

Vicenta
-No te vayas, por favor, no así, no con lo que piensas en estos momentos.-Dice tomando mis manos y luego sosteniendo mi cara.

-Ya escuché lo suficiente.-Digo muy seria y cabizbaja.

-No, no. Estás molesta y lo entiendo.y ¿sabes qué? Lo siento, okay? Y tengo miedo porque me asusta perderte y quedarme solo o algo así.-Dice mientras saca las manos de mi cara , y se voltea.

-Daniel.-Digo como ultimatum antes de salir de la habitación

-N...no, ¡escúchame! Vamos a trabajar en esto: en la confianza... porque tienes razón, estoy exagerando en el tema de Jack.-Dice desde su posición

-Shh... ¡mírame, Daniel!-lo hace-yo te escogí a ti, a nadie más, ¡entiéndelo!-Me acerco a él,paso mis manos a través de su cabello, y mis dedos acaricia cada hebra- Amo a esta familia y no la pienso separar. Solo dame un voto de confianza. -Le digo y le sonrío.

Daniel me queda viendo por unos instantes, luego deja un beso en mi coronilla.

-Vamos a intentarlo ¿sí? -Dice sosteniendo mi cara-Porque estoy seguro de que este amor vence todo esto. Y ¿te acuerdas de mi promesa?

-¿Cuál de todas? -Pregunto con una sonrisa.

-La del matrimonio; de que te voy a amar todos los días de mi vida, aunque me odies, esa es mi promesa y te amo.

Siento que me abraza y empieza a acariciar mi cabello. Me separo de él y le acuno la cara entre mis manos; le digo con voz de ardilla:

-Eres un celosito.

-Que te ama mucho-me besa suavemente en la boca-te amo, Vicenta.

-Yo también te amo.

Pasan las horas y llegan las 12:00 del día cuando veo la camioneta de Jack entrar. La ultima vez que nos vimos quedaron cosas pendientes entre nosotros. En cambio Daniel y Danielito están jugando en la sala pero se que me esta viendo porque lo siento. Veo a Jack bajarse de la camioneta y acercarse a mí. Me saluda con un beso en la mejilla:

-Hola Chenta.-Dice con su típica sonrusa mientras se quita las gafasde sol.

-A los años mijo. ¿Como te ha ido?-Le digo normal mientras me siento normal.

-Estoy a full con el trabajo. Ahora con lo del Teca, la DEA enloqueció literalmente.-Dice con una mueca y cierta compasión por mi, no me gusta que me tengan pena pero disimulo lo mejor que puedo.

-Me imagino pues, nadie se lo esperaba, es muy complicado estar tranquila ahora Jack, aveces siento que me persigue, pero sé que no es así, este lugar es seguro-Digo mientras observo los árboles que rodean el rancho, y las grandes paredes.

-Me enteré de la amenaza y pues vine a ver como te encuentra y como van las cosas-Dice mientras fruce su ceño y a sus ojos les da la luz del sol, no mires nada Vicenta.

-De hecho un poco nerviosa pero trato de no reflejarlo.

-Tranquila, Acero. A nadie le va a pasar nada.-Dice dandome una palmada en el hombro.

-Dios te oiga, mijo, pero ¿qué era eso que venías a decirme? -Digo cambiando de tema y queriendo saber más

-Como ya te dije, estoy procurado por ustedes; por Danielito y por ti-me da una caricia en mis hombros.

-No me va a pasar nada, Jack. Mira, lo del Teca está medio complicado pero pues debemos tranquilizarnos.-Digo dandome una vuelta de camino a la casa.

-¿Cabeza fría? -Pregunta riendosedde mí.

-Sí, cabeza fría, Jack-Respondo señalando mi cráneo.