Vicenta
Su voz diciéndome casi sin poder respirar: "Significa que te amo para siempre".También recuerdo lo que me dijo antes de decir sus votos:
"Quiero que nos enfoquemos en la familia que vamos a formar" "¿Que familia si te acaba de aparecer una nueva?"
"Si, pero eso no fue por decisión... Quiero envejecer contigo, quiero estar contigo en las buenas y en las malas y no me importa que el mundo se este cayendo, si estoy contigo, tengo certeza que todo está bien"... "Quiero casarme contigo, quiero cuidarte todos los dias de mi vida"..
—Lo hiciste Daniel y lo sigues haciendo—Digo en voz alta mientras pestañeo inútilmente para calmar las lágrimas que se desbordan de mis ojos.
Veo un papel amarillo y las firmas en él, el papel que más dolor me ha causado, el culpable de mis lágrimas, y es que como olvidar tan linda promesa, como seguir cuando sientes que tu alma ya no esta,y más que todo como lograr sonreir después de tanto dolor.
"Y de ahora en Adelante yo seré Vicenta Acero de Phillips y usted será Daniel Phillips de Acero".
Pero algo más doloroso llega después de esa frase, muchos dicen que después de la tormenta llega la calma, pues ¿Qué pasa cuando tu encuentras la paz a pesar de estar en una tormenta constante? y peor aún ¿Qué haces cuando de un día para otro la calma ya no está contigo, ¿Qué pasa si sientes que la tormenta ganó?¿Qué haces cuando sientes que el mar se llevó lo que más quería?¿Qué pasa si simplemente un día sabes que no le puedes ganar a la tormenta y te sientas a esperar que te lleve con ella?, creo que la respuesta es simple, la tormenta no te llevo con ella porque la calma no había dejado de luchar con ella aunque no te des cuenta, porque él siempre estuvo peleando.
"Mi nombre es Vicenta Acero, viuda de Phillips".
Era algo que decía una persona que simplemente quería cuidar a su hijo para que la tormenta no se lo quite, sin saber que había alguién protegiendola desde lejos.Veo una camisa negra y la recuerdo claramente,es la que usó el día de la explosión en las lanchas.Uno de los peores de mi vida y junto con esa memoria vienen sus palabras de despedida: "Pero te voy a estar esperando con un tequila para celebrar lo mucho que te amo".
Agarro su camisa y la olfateo, aún tiene su perfume entonces seco mis lágrimas con ella,pero en medio de esa camisa encuentro una foto, es de ese mismo día.A Chava se le ocurrió tomarnos una foto distraídos antes de que pasara todo donde salimos de espaldas con las manos enlazadas y yo apoyada a su hombro, de fondo sale el océano azul, y toda su paz y tempestad, y ahí caigo en cuenta de todo, siento como la verdad llega a mi, y esta vez estoy segura de todo.
—Aún te amo, Daniel Philips—Digo en voz alta y con una sonrisa en mi rostro. Creo que siempre lo supe pero me negaba a aceptarlo porque no era "lo correcto", entonces miro el reloj y veo que son las 9:00 de la noche. Decido escribirle
Vicenta: Daniel, por si aún te interesa saber, ya tomé una decisión y quisiera decírtela ¿nos podemos ver en el patio? ¿A qué hora puedes?
Lo envío y para mi sorpresa, no pasan ni dos minutos cuando ya tengo una respuesta que dice:
Daniel: Nos vemos en el patio a las 10:00 pm. Vicenta: Listo.
¡Qué raro! Pensé que querría verme ahora mismo porque la última vez que lo vi, o sea hoy, estaba desesperado por saber, pero aún así quiero arreglarme y ponerme bonita para decirle que aún lo amo. Miro en mi closet y no encuentro nada que me guste ¡Ay, ya parezco de preparatoria! ¡Vicenta, decídete ya!, veo en una percha olvidada casi al fondo del armario un vestido azul,ese vestido azul que él me compró el día que salí de la cárcel, lo que por cierto, también fue gracias a él,decido sacarlo para ver si no huele a guardado pero está lavado y el olor del suavizante sobres sale, así que lo puedo usar.Me baño y me coloco el vestido mientras me peino el cabello y me pongo un poco de brillo en los labios y mi perfume, ese que tanto le gusta a él.Ya casi son las 10:00 pm de hecho solo quedan cinco minutos y estoy por salir de la habitación cuando veo el papel amarillo encima de la cama lo agarro y lo meto en el mini bolsillo que tiene mi vestido..
—Tú te vienes conmigo, promesa.
Salgo al patio y lo veo ahí vestidos con un pantalón negro y su camiseta blanca.Cuando escucha los pasos de mis sandalias voltea en mi dirección.
—E...ese vestido ¿es—Dice con el rostro iluminado y una gran sonrisa,mientras se tapa con una mano su boca.
—El que tú me regalaste, aún lo tengo—Digo suavemente mientras me acerco a donde esta él.
—Te ves bellísima, aunque para mí siempre vas a ser la más bella— Me dice mientras me mira intensamente a los ojos.
—Gracias... ahora yo debería responderte algo—Digo mientras me acomodo el cabello.
—STOP!—Dice antes de que pueda hablar
—¿Qué pasa?—Pregunto riéndome de su acción
—Sea cuál sea la respuesta, te preparé algo porque quiero que veas lo enamorado que estoy de ti—Me dice mientras me da una corta sonrisa.
—Pee...ro—Respondo queriendo decirle rápidamente lo que siento.
—Pero nada ¿puedo tomar tu mano?—Dice mientras me mira sonriendo a lo que yo le sonrío en respuesta.
—¡Claro!—Le digo sonriendo.
Toma mi mano y caminamos por el patio hasta llegar a una parte donde están sembradas las hortensias donde veo una hermosa mesa con rosas celestes y blancas, un par de velas y los platos protagonistas de la noche Birria.
¡Ay el desierto!
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[1] Cenizas de un lazo de Acero [Señora Acero: la Coyote]
Fanfiction¿Has sentido la necesidad de regresar el tiempo y cambiar algo? Para Vicenta esto esta presente en todo momento, las ganas de volver y enmendar las cosas. De alguna manera,el tiempo se ha convertido en uno de sus peores enemigos. A pesar de que...