Si yo tú, si tú yo contigo 200 - Finalizado [Good Omens]

CCLXVII

"¿Puedo entrar" Gritó Lilith detrás de la puerta "Te traje el desayuno..." No tuvo que esperar mucho antes de que el Omega abriera la puerta, con el cabello despeinado y una expresión que indicaba que llevaba despierto un buen rato.

"Esa es mucha comida para mí solo..." Indico el joven apuntando a la bandeja "Es porque es tu desayuno y mi desayuno, ahora déjame pasar, esto es pesado y tengo hambre"

Azirafel abrió la puerta, y la pelirroja coloco la bandeja de madera sobre la cama, sentándose e invitando al chico a que la acompañara.

"En realidad no tengo hambre" Indico el rubio algo ansioso "Debes comer, la energía que llevas encima es debida a los nervios, si no te cuidas caerás enfermo" Con un suspiro de resignación el chico se dispuso a acompañarla picoteando un plato con fruta.

"Michel vino temprano" Hablo de nuevo el Omega "Me dijo que habían podido estabilizar el estado de Crowley y también había despertado, se quedará en observación, pero no mencionó si podía verlo o no..."

"Es un paso a la vez" Comentó la joven mordiendo una rebana de pan "Ahora sabes que él esta fuera de peligro, que es mucho más de lo que sabías ayer"

"Pero no puedo dejar de pensar de que me están escondiendo algo, Michel no me quiso dar más detalles, dijo que tenía que ir a cambiar turno con Gabriel, y explicó todo tan rápido, como si no quisiera soltar demasiada información..."

El Omega bajo la mirada abrumado, en esos momentos lo único que quería era alguien con quien poder hablar.

"Me gustaría poder ayudarte" Habló Lilith tras unos minutos "Pero tampoco se mucho al respecto, es la misma versión que le dio tu hermana a Metatron..."

"¿Estuviste cuando hablo con él?"

"No, pero los muebles afuera de la oficina necesitaban ser sacudidos..." Azirafel rio por la cínica respuesta y luego su tono cambio a uno más dolido "No he visto a Metatron desde ayer, supongo que está enojado por todo lo que sucedió..."

"O asustado" Interrumpió la Omega "Tal vez teme hablar contigo y que te encuentres mal, o estar solo a tu lado y no tener idea que decir... Puede tener miedo de no saber cómo ayudarte"

"¿Puedo preguntarte algo?"

"Soy pelirroja natural, pero puedo recomendarte mi shampoo..."

"Estoy hablando en serio" Azirafel fue recuperando el apetito conforme hablaba "¿Por qué defiendes tanto a mí hermano?"

"Porque nadie más lo hace, todos ustedes creen tener la razón y ni siquiera se paran a pensar en lo que puede pasar, Metatron ha hecho mucho por mí, lo menos que puedo hacer es jugar el papel de abogado del diablo..."

La chica hizo una pausa y sus ojos esmeralda se encontraron con el azul pálido del chico.

"Escucha Azirafel, si quieres hablar con él, acércate, es la misma distancia para cualquiera de los dos que dé el primer paso..."

Continuaron comiendo en silencio hasta que los platos y jarra de jugo se encontraron vacíos, Lilith abrió las cortinas y ventana para que un poco de aire y luz entraran a la habitación.

"Sabes Azirafel" Dijo la pelirroja levantando la bandeja para llevársela "En realidad yo también tengo una duda... Pero temo que sonaré algo prejuiciosa..."

"¿Cuál es?" La chica mordió su labio inferior y tras una pausa para pensar sus ideas volvió a comentar "Verás, he conocido a muchos Alphas y puedo contar con una mano los que no han sido imbéciles... Pero tus hermanos son... ¿Peculiares?"

"Metatron dice que Gabriel se cayó de cabeza cuando era niño y por eso quedó así..."

"¿Ya estás de humor para bromas?" Sonrió la Omega divertida "A lo que me refiero es que... Tus hermanos manejas sus feromonas de manera... Diferente a los otros Alpha..."

La pelirroja dejo la bandeja en una de las mesas y coloco seguro en la puerta para acercarse nuevamente al chico.

"Por ejemplo" Susurro Lilith "Supe que Gabriel fue seducido por una Omega... Y que a pesar de que ella uso sus feromonas él solo se fue... Así, sin más..."

"Hablas de Ba'al ¿verdad? La chica que nos visitó hace tiempo... Michel no me dio detalles, pero me alegra que él haya tomado la decisión correcta..."

"Si, pero ¿cómo? Cuando un Alpha percibe feromonas, pierde los estribos, su pensamiento lógico se nubla ¿cómo puede solo levantarse e irse?" Antes de que el rubio pudiera responder la pelirroja continúo "También tienes a Michel, es una Alpha, y sale con un Alpha, este chico..."

"Lucifer..."

"¡Si! Él..." Fingió sorpresa por recordar el nombre "Ambos Alphas y uno de alta categoría ¿cómo es que no quieren matarse el uno al otro? Los Alphas por naturaleza son competitivos entre ellos ¿no? ¿Cómo pueden tener dos personas así una relación?"

"Creo que esos son solo estereotipos Lilith..."

"Lo sé, lo sé..." La chica hizo una pausa recordando el día que Metatron entró en celo "Pero ¿cómo hacen para ir contra esos instintos? Tus hermanos son a los único Alphas que he visto actuar así..."

"Mamá" Respondió Azirafel casi sin pensar "Recuerdo que ella siempre decía que los instintos no eran un pretexto para no responsabilizarse de nuestras acciones, que para ser personas de bien debíamos trabajar duro, ser educados y no hacer nada que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros... Yo era muy pequeño, pero ahora entiendo que mamá siempre cuido que nos convirtiéramos en buenos adultos... Y estoy seguro de que a toda costa quiso evitar que mis hermanos fueran el tipo de Alpha que era su padre..."

"Estoy segura de que sabe que hizo un buen trabajo" Dijo Lilith con una sonrisa "Ahora Azirafel, estar enfermo no es pretexto para no bañarse, date una ducha mientras te buscó un cambio de ropa, y ni creas que arreglaré tu cama, tú no eres quien firma mis cheques"

El chico asintió, la visita había aliviado un poco los nervios que tenía esa mañana y agradeció internamente a Lilith por eso.

En cuanto a la Omega, llevo la bandeja con platos a la cocina, y mientras los limpiaba pensó que donde sea que estuviese la madre del ese cuarteto de hermanos debe sentirse orgullosa de haber cumplido su cometido, ya que ninguno de esos Alphas era como Salomon Archangel.