CCCXXVIII

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Al colgar la llamada, Remiel se quedó observando la pantalla de su celular sin saber que decir ¿por qué uno de los hermanos Archangel pregunta por Asmodeo? Pensó para sí mismo, se levantó de su silla golpeando la mesa frente a él y luego trato de recoger las cosas que habían caído.

"¿Estás bien Remi?" Pregunto una voz, haciendo voltear al Beta "Lamentó llegar tarde, fue difícil salir del trabajo..."

"Abbadon..." El aludido sonrió dulcemente y tomo asiento en uno de los lugares vacíos.

"Hacía mucho que no nos veíamos ¿verdad?"

"Si, mucho tiempo... ¿Cómo has estado... hermano?"

Abbadon era un Omega que robaba miradas a donde quiera que fuera, de rasgos delicados, complexión delgada, hermosas pestañas largas y grandes ojos color avellana, muchos decían que su aroma era como el de la brisa del mar, Remiel siempre se había tan diferente a él.

"Jo..." Exclamo con una mueca infantil el más joven "Me dices hermano como si fuera algo terrible, pero ¿cómo has estado? ¿Aún trabajas en el mismo hospital? ¡Papá nunca me cuenta nada sobre ti!" El chico se inclinó con los codos sobre la mesa recargando su rostro en sus manos, expectante a lo que el otro tuviera para decir.

"Todo sigue igual" Contesto alzando los hombros el Beta "Mucho trabajo, algunos pacientes con problemas más graves que otros... Es gratificante al final del día ¿sabes? Dar las buenas noticias a los futuros padres, ayudar a quien lo necesita..."

"Siempre has sido de buen corazón, Remi" Río cantarinamente el Omega "Por eso... Eres más propenso a que los demás se aprovechen de ti..."

Remiel desvió la mirada y escondió las manos debajo de la mesa, sospechando que su hermano quería llevar la conversación por otro lugar.

Abbadon no era en realidad el hermano sanguíneo del Beta, sino el hijo de la segunda esposa de su padre, pero se habían criado juntos desde pequeños, habían sido muy unidos y no fue hasta que sus rasgos Omegas y Beta se hicieron presentes, que su relación comenzó a cambiar.

"¿Para qué me citaste aquí?" Preguntó directamente el mayor "No creo que solo quieras que hablemos y ponernos al corriente ¿o sí?"

"También muy perspicaz..." El castaño suspiró y luego tomo un maletín que llevaba con él, de donde saco una carpeta que extendió hasta Remiel.

"¿Qué es esto?"

"Es por lo que te cité aquí, necesito tu ayuda..." El Beta la abrió y comenzó a leer el contenido "Son los papeles de divorcio, Asmodeo no responde las llamadas de mi abogado y no quiero hacer esto más grande... Por eso te llamé..."

"¡¿Quieres que yo le pida que firme?!" Exclamó Remiel incrédulo "¡Pídeselo tú en persona!"

"¡Tú más que nadie sabes que no puedo hacer eso!" Con incomodidad el Omega se movió en su asiento "No después de lo que paso la última vez que nos vimos..."

"Abbadon..."

"¡Sé que me crees!" Le interrumpió el hermano más joven "¡Si no lo hicieras no me hubieras ayudado a salir de allí! ¡Mejor que nadie sabes que Asmodeo es una terrible persona!"

"Yo no sé de qué hablas..." Remiel se encogió más en su asiento.

"¡Lo sabes, pero te niegas a verlo!" Algunas personas a su alrededor voltearon en su dirección, por lo que el Omega bajo la voz para continuar "Desde que lo conoces, solo te has hecho el tonto con su comportamiento, creando una imagen falsa de cómo es en realidad..."

"Tú no sabes cómo es Asmodeo..."

"¡¿Y tú sí?!" Bufo divertido el castaño "¡¿Crees que lo sabes?! ¡¿Crees que harás que cambie?! ¡Asmodeo no te quiere Remiel! ¡Sólo te usa porque tú se lo has permitido durante todos estos años!"

Si yo tú, si tú yo contigo 200 - Finalizado [Good Omens]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora