CCLXXXIX

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"¡Eva!" Gritó una voz sobresaltando a la Omega "¡¿Qué hiciste con el dinero?! ¡Ladronzuela vulgar!"

"No sé de qué hablas..." Contestó la pelirroja ignorando los reclamos para continuar con sus tareas.

"¡¿No sabes de que hablo?! ¡Mírame a la cara cuando me mientas!" La mujer arrojo al suelo las cosas sobre la mesa "¡¿Es así como agradeces que te haya soportado a ti y el malnacido de tu padre?! ¡¿Robándome?!"

"No te robe, tal vez estabas tan ebria que los perdiste por allí..." La chica cayó al suelo debido al golpe que recibió directamente en el rostro.

"¡¿Te crees muy graciosa?! ¡¿Eh?! ¡De seguro tomaste mi dinero para comprar tus drogas!"

"¡Son supresores!" Gritó la Omega levantándose "¡Y a diferencia de tu maldito licor si sirven para algo!"

"¡Escúchame mocosa insolente!" El aliento alcohólico golpeo con fuerza a la pelirroja haciendo que esta desviará el rostro y causando que la furia de su madre incrementara "¡¿Crees que eres mejor que yo?! ¡No eres más que una estúpida e inútil Omega! ¡No puedo esperar el día en que un Alpha te marque y te largues de esta casa!"

La chica trato de cubrirse de la serie de golpes, en medio de aquella escena, la puerta se abrió y la atención de la mujer dejo de centrarse en la pelirroja.

"¡¿Dónde estabas?! ¡¿Tomaste dinero nuevamente?! ¡¿Lo perdiste todo como siempre?!"

"¡Cállate!" Contestó arrastrando las palabras un hombre "¡Ese dinero lo ganó yo! ¡Y como lo gaste es mi problema!"

Aprovechando la discusión, la chica huyo a encerrarse en su habitación, coloco una silla para impedir que alguien entrará y se metió a la cama tratando de que el sueño la alcanzará rápido.

"¡Eva!" Le gritó una voz a medio pasillo "¡Espera por favor!"

"Señorita Honey..." Murmuró la Omega con una sonrisa mientras espera a que la profesora la alcanzará.

"L-lo siento... Debo dejar de aceptar pastelillos en la sala de profesores" Respondió con jovialidad la mujer, aquella maestra era bien conocida por su paciencia y amabilidad, siempre tendía una mano al alumno que lo necesitará.

"¿En qué puedo ayudarle?" Preguntó la pelirroja "¿Me atrasé con algún ensayo? Juraría que hablaríamos sobre los derechos civiles hasta la próxima semana..."

"No es nada de eso" Cuando ya se encontraba más cerca, la profesora observó el gran moretón que cubría la mejilla de la Omega, por lo que está trato de ocultar con su larga cabellera "¿Estás bien? ¿Cómo te hiciste ese golpe?"

"Un accidente sin importancia ... Tropecé en casa, eso es todo..."

La chica sabía que si quería podía contar la verdad, decir que era lo que provocaba los múltiples golpes con los que iba a la escuela, pero también conocía las historias sobre los orfanatos y hogares temporales, los niños que terminaban allí, si era paciente un poco más, cuando cumpliera la mayoría de edad y terminará la preparatoria, podría aspirar a un mejor futuro lejos de sus abusivos padres.

"Sabes que puedes contar conmigo ¿verdad? Te ayudaré en lo que sea..."

"Estoy bien, de verdad... Pero dígame ¿para qué me estaba buscando?" Cambió con rapidez el tema "¿Necesita mi ayuda?"

"Oh... Sobre eso, acabo de calificar tu ensayo de esta semana, encontré sumamente interesante tu postura sobre como el ritual de marca entre Alpha y Omega, no es más que una práctica brutal para imponer sumisión..."

Si yo tú, si tú yo contigo 200 - Finalizado [Good Omens]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora