CCCXXII

332 53 6
                                    

"Beelzebub" Gabriel se sentó en la cama al lado del pelinegro "Oye, tengo que ir al trabajo, te deje comida caliente, llámame si necesitas algo ¿de acuerdo?"

El Beta se despertó perezosamente, tallo uno de sus ojos tratando de enfocar, y luego se incorporó con lentitud.

"Es sábado" Dijo con suave voz mirando al castaño "¿Por qué tienes que ir?"

"Debo revisar los reportes mensuales y también contestar algunos correos que he descuidado, Txus me ayudo el fin de semana pasado, pero me dijo que necesitaba libre este" Explicó el Alpha tratando de arreglar su corbata.

"Nunca te veo en casa" Interrumpió Beelzebub acercándose hasta Gabriel para abrazarlo por la espalda "Siempre me dejas solo en la cama, entras cuando estoy dormido y te levantas antes que yo lo haga ¿por qué?" Preguntó apretando su agarre.

"N-no... Yo..."

"¿Estás evitándome? ¿Estás enojado conmigo?" Le encaró el pelinegro soltándolo para acercarse hasta que sus caras estuvieron demasiado juntas.

"¡N-no es nada de eso!" Contestó el Alpha desviando la mirada de los penetrantes ojos azules del chico "S-sólo quiero darte tu e-espacio..."

"Pero antes... Querías estar todo el tiempo conmigo y ahora es como si quisieras que me alejara de ti..." Murmuró el Beta con tristeza.

"Beelz no..." Es culpa, quiso contestar el Alpha, siento culpa de estar mintiéndote "Y-yo no te quiero lejos de mí, solo trato de que no hacer nada que te incomode..."

"¿Qué me incomode a mí o te incomode a ti?"

Gabriel observo la expresión del Beta, más que molesto, parecía dolido, le pareció más delgado tras la camisa que le quedaba grande, donde podía ver parte de su hombro y clavícula. El castaño alzo su mano y con su pulgar acarició la mejilla del chico haciendo que este respingará sorprendido.

Se acercó hasta él y lo beso con los labios abiertos, primero lenta y suavemente, hasta que Beelzebub fue el primero en golpear su lengua contra la suya, abrazándose de su cuello.

"Sigue" Dijo el Beta cuando el más alto se separó "Quiero que me beses más..." Luego sus ojos le miraron de manera suplicante, haciendo que la respiración del Alpha se acelerara, volviendo a unir su boca con la de él y lanzando la camiseta del pelinegro lejos.

"G-Gabriel..." Gimió el más joven al sentir el roce de las amplias manos sobre su piel ahora expuesta, hasta alcanzar su ropa interior.

"¿Quieres que me detenga?" Preguntó el castaño algo preocupado de haber actuado demasiado apresurado.

"N-no... C-continúa..." Respondió el Beta sin mirarlo y cubriendo su rostro con una de sus manos "P-por favor..."

El Alpha obedeció, recostó al chico sobre la cama con cuidado, y luego levantó sus caderas para deshacerse del pedazo de tela que lo cubría, dejándolo desnudo por completo. Se tomo su tiempo para contemplarlo, dándose cuenta de cuanto había deseado poder verlo de esa manera nuevamente.

"¡N-no mires tanto!" Se quejó el más joven avergonzado "¡Soy un Beta! ¡No hay nada para admirar!"

"Que seas un Beta no tiene nada que ver con lo precioso que eres" Gabriel respondió sin pensar, inclinándose para besar la frente del chico "Y no puedo dejar de maravillarme con tu cuerpo, tu rostro, todo en ti es fascinante y podría pasar horas solo observándote..."

"¡C-cállate, Gabriel!" Ahora el pelinegro cubría por completo su cara, donde solo se miraba su cuello y orejas completamente rojas.

"¿Te apena que te diga lo lindo que eres?" Se burló el castaño besando el cuello del más joven "¿Te he dicho lo mucho que me gusta cómo se eriza el cabello de tu nunca al tocarte? ¿O lo adorable que eres cuando frunces el ceño y haces esas muecas involuntarias?" Llevo su boca hasta uno de sus pezones lamiendo con entusiasmo mientras que sus manos acariciaban el cuerpo del chico.

Si yo tú, si tú yo contigo 200 - Finalizado [Good Omens]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora