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"¿Por qué estás tan serio?" Preguntó Azirafel mientras llenaba dos copas frente a él "Siempre hablas y hablas por horas y ahora no dices ni una palabra..."

Se sentó en sofá muy cerca de su acompañante, con una de sus manos cepillo su cabello hacia atrás y luego se giró con una dulce sonrisa.

"¿Pasa algo?"

"N-no... Nada..." Wilde apartó la mirada avergonzado,observó a través de una ventana los copos de nieve caer, preguntándose en qué momento había cambiado así el clima.

"Mientes..." El rubio se acercó más, tomando la barbilla del Omega y haciendo girar su rostro hacia él "Te conozco bien, algo te está molestando" Acaricio su mejilla bajando su dedo hasta su cuello, donde ya no había collar anti-marca.

"A-Azirafel..." Murmuró cuando un escalofrío recorrió su columna.

"Está bien, no tienes que ser tímido..."

Lentamente ambos cuerpos se dejaron caer sobre el sofá, con Wilde recostado observando el rostro amable del menor de los Archangel siendo iluminado por la luz de la habitación, sus rizos brillaban y sus ojos azules claro parecían incluso más dulces que antes.

"Todo estará bien..." Escuchó como le susurraba "Por qué ahora estoy aquí contigo..."

La alarma del telefono comenzó a sonar, haciendo despertar de golpe a Wilde, el joven se incorporó de un salto, mirando a su alrededor sin entender que era lo que sucedía.

"¿Un sueño?" Se preguntó confundido "¡¿Fue todo un sueño?!" Golpeo su rostro contra una almohada ahogando un grito de frustración.

Después de tomar una larga ducha fría, el castaño arreglo sus cosas y se dirigió con destino a la Facultad, sintiéndose aún demasiado avergonzado.

"¡¿Es eso lo que sienten los Alphas?!" El Omega pateo una piedra frente a él recordando la claridad de los detalles "¡¿Y por qué era yo tan sumiso?! ¡El Azirafel que conozco jamás sería así de sexy!"

De repente el teléfono del chico vibró en su bolsillo en señal de un mensaje, al leer el destinatario su rostro enrojeció reconociendo el nombre del otro Omega.

No podré ir a la escuela hoy, me siento muy mal ¿te molestaría preguntar la tarea de mis clases? Por favor :(

Azira

Wilde suspiró, no podría negarse ante una petición como aquella.

Claro, si quieres puedo ir a visitarte ¿te parece bien?

Wilde

Sin saber porque, se sentía ansioso por la respuesta.

¡Claro, cuando gustes!

Azira

Siguieron conversando un poco más, el castaño estaba tan distraído que choco un par de veces con las personas que caminaban por la acera.

Trataré de dormir Wilde, anoche no pude pegar los ojos, ten un buen día ️<3

Azira

¡Descansa! Sueña conmigo~

Wilde

Ja,ja,ja,ja, trataré, nos vemos :)

Azira

El Omega no pudo evitar que su corazón se acelerara al leer aquello, se lamentó un poco de encontrarse en público, ya que de lo contrario hubiera saltado de alegría abrazando el teléfono contra su pecho.

Cuando Wilde le contó a Azirafel acerca de su trabajo, el castaño temió que eso pudiera cambiar la forma en como su amigo lo veía y trataba, pero muy al contrario de lo que pensó, el joven Archangel era igual de amable y dulce que siempre.

Nunca le pregunto qué era de lo que había hablado con Lilith, pero asumía que al igual que con él, le mostro la más sinceras de las sonrisas diciendo que lo único que quería era ayudar.

"Soy tan despreciable..." Murmuró el Omega perdiendo la alegría "Jugando al enamorado con Azirafel o diciéndole que ayude a Lilith cuando no puedo siquiera ser lo suficientemente valiente para hacer algo por mí mismo..."

Con un humor ahora sombrío, el joven se encontraba a un par de calles para llegar a la Facultad, cuando un aroma y figura familiar llamaron su atención.

"No puede ser..." Murmuró con sorpresa, acercándose a paso veloz hasta quedar frente a frente con el otro chico "¡¿Qué haces tú aquí?!" Exclamó cruzando los brazos sobre el pecho.

"H-hola... Tú eres el amigo de Azirafel ¿verdad? ¿Wilde?"

"Sí" Respondió con enfado el Omega "Pero no contestaste mi pregunta ¡¿qué haces tú aquí?!"

El Omega noto entonces como al lado del más alto había una maleta y entre sus manos una hoja blanca con algo escrito en ella, que doblo y guardo en su chaqueta al sentirse observado.

"V-vengo a ver a Azirafel..."

"¡Sabes muy bien que no debes! ¡Podría ser peligroso para él!" El Omega hizo una pausa tomando aire para calmarse y observando lo triste que parecía el otro chico intento mejorar su tono "Y también te haría mal a ti, Crowley..."

El Alpha alzo el rostro al escuchar su nombre, intento hablar, pero cada vez que abría la boca no sabía que decir, con una de sus manos sujeto la manga de su chaqueta en un gesto que Wilde solo había visto hacer a los niños pequeños.

"Dios..." Exclamo con frustración con el Omega "¡Luces como un perro abandonado! ¡¿Qué demonios te hizo venir hasta acá en tal estado?! ¡Alpha idiota!"

El pelirrojo no contesto, pero su estómago sí que lo hizo, rugiendo con fuerza logrando que el más alto se sonrojara.

"¿Hace cuánto que no comes?" Pregunto Wilde frunciendo el ceño.

"E-estoy bien..."

"¡No lo estás! ¡Ven conmigo!" El castaño tomo del brazo al chico, llevándolo en dirección opuesta a la escuela "¡No puedes estar deambulando como un vago mal nutrido!"

"P-pero... ¿Qué hay de Azirafel?" Replico el Alpha girándose para buscar con la mirada al rubio.

"No se sentie bien así que no vendrá..."

"Oh..." El rostro ya de por si triste de Crowley pareció deprimirse aún más "¿Y t-tus clases?"

"¡Escucha!" Wilde se detuvo apretando su agarre en el más alto "Hago esto por Azira no por ti ¿de acuerdo? Si él te viera en un estado tan lamentable como el que estas no harías más que preocuparlo más ¿queda claro?" Se giró para encarar al Alpha quien solo asintió y dejándose guiar por el castaño.

"G-gracias..."

"¡Solo cállate y sígueme! ¡Después iremos a que tomes un baño porque apestas a ropa sucia!" Crowley esta vez no replico, solo continuó caminando en silencio.

Lo hago por Azirafel, pensó el castaño sin soltar la muñeca de Crowley, y no porque se vea triste, solo, abandonado y sin esperanza... Justo como yo...

Si yo tú, si tú yo contigo 200 - Finalizado [Good Omens]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora