Víctima Indefensa

52. Indomables

Jueves 17 de Octubre de 2030

De camino a Lincoln, repaso mentalmente las cosas que debo hacer: hablar con Tom, explicarle a Jessica la situación, entregar la información de Angelina a White y evitar a toda costa que Alma quiera sacrificarse por mí. Andrea casi no me ha dicho gran cosa desde ayer. Durante el desayuno se abstuvo de hacer comentarios. No puedo más con la mirada que lleva mi hermana tras el volante.

- ¿Por qué no me dices lo que piensas? - le espeto.

- Resulta difícil aceptar que mis hermanas no confían en mí - confiesa con tono de frustración.

- No puedo hablar por Kate, solo por mí - apunto antes de una pausa obligada - y solo me queda decirte que no sabía qué pensar sobre mis sentimientos.

- Sé que no siempre te presto toda la atención que debería - masculla.

- Sé que tienes tus propias preocupaciones - sostengo - más de una vez me lo has dejado claro.

- Pero... - titubea antes de morderse la lengua - nunca imaginé que fuese un muro tan alto entre nosotras.

- No es solo tu culpa - acepto - sé que como hermana menor en ocasiones puedo ser un poco asfixiante.

- Hay algo de eso - afirma mientras asiente - pero aun así me siento un poco tonta por no haber notado lo que pasaba contigo, sobre todo si consideramos que pasó bajo mis narices.

- Alma y yo tratamos de ser lo más discretas posibles - alego.

- Lamento mucho que haya sido Angelina quien las descubriera - sostiene.

- Yo también - susurro - pero tal vez sea lo mejor.

- ¿Por qué lo dices? - inquiere mientras enarca una ceja.

- Al menos ya no tendremos que escondernos - afirmo con sosiego.

- ¿No te importa lo que te puedan decir? - formula una pregunta para la que antes no tenía una respuesta.

- Para ser honesta - intento esbozar - hasta ayer era algo que venía a mi mente y me daba miedo.

- ¿Qué cambio? - consulta mientras se aparca.

- Saber que mi familia me apoya... - afirmo con una sonrisa - eso y que tengo algo muy fuerte con la mejor persona que jamás he conocido.

- Sí Alma es tu razón - murmura - puede que sea una muy buena... esfuérzate.

- Eso haré - afirmo al tiempo que salgo del auto decidida.

Mis pasos, son más seguros y firmes de lo que jamás recuerdo. Una sensación que no sé describir me impulsa a creer que todo saldrá bien y sino es el caso... hallaremos soluciones. Hay un fuego que hace crepitar mi mundo, ella es mi combustible. Empiezo a mirar todo con nuevos ojos. Mi vida es mucho más que la escuela, mis amigos y mi familia. Hay un mundo de oportunidades que solo espera que tome mis decisiones. Y la primera resolución grande que elijo tomar, justo aquí y justo ahora, es ser valiente y hacer todo lo que se encuentre en mi mano para proteger mi relación con Alma. No vacilo ni por un momento en dirigirme hacia Tom.

- Hola bella ¿Cómo estás? - consulta con una sonrisa mientras me besa la mejilla.

- Muy bien - afirmo y luego tomando su mano le pido - sígueme.

Tom no duda en hacerlo, después de todo para él estamos saliendo. Decido llevarlo a un corredor vacío y afrontar la primera tarea que puedo resolver. Empieza a acercarse con la intención de besarme, lo sé, pues he aprendido sus movimientos. Lo detengo alejando sus brazos de mi espalda.