Jueves 17 de Octubre de 2030
Natasha y yo conseguimos terminar el día con relativa tranquilidad. De momento nuestros amigos nos están apoyando. Nadie se ha espantado ni nos ha tratado como bichos raros. Creo que a final de cuentas no importa tanto lo que otros piensen de nosotras, si no lo que sentimos nosotras.
Cada una se marcha por su lado hoy, pues una visita en el campus de Lincoln, me toma por sorpresa. Camino hasta su auto con pasos seguros. Ella me observa, pero cada par de segundos apunta en dirección a mi rubilinda. Me pregunto si ésta es otra señal del destino, pues parece que es otra coincidencia que me hace pensar en lo complicada y enrevesada que puede ser la vida.
- Hola Jimena – afirmo con mi mejor sonrisa.
- Hola Alma, necesito hablar contigo un momento – dice en un tono tan suave que accedo – ¿te parece si vamos al parque?
- De acuerdo Jime, vamos – contesto ansiosa.
Me monto en su auto en el asiento del copiloto. Ella conduce con una serenidad que le desconozco, pues nunca fue muy hábil para esto.
- Te has vuelto muy buena conduciendo – apunto tratando de hacerle un cumplido.
- Tenía que llenar mi tiempo con algo – alega – por eso le pedí a papá que me ayude.
- Vaya eso si me sorprende – afirmo bosquejando una sonrisa.
En un instante llegamos al parque y sin decir nada nos encaminamos a un viejo banco de roble, lugar de algunas de nuestras conversaciones más serias. Me doy cuenta que hace mucho que no vengo aquí. Afortunadamente el lugar está libre. Me quedo de pie hasta que ella se sienta.
- Bueno Jimena, te escucho – le digo para invitarla a hablar.
- Estoy aquí... - titubea – para despedirme.
- ¿Despedirte? ¿A qué te refieres? – consulto con cautela.
- He decidido hacer algo productivo con mi vida – explica.
- Por cuánto tiempo piensas marcharte – pregunto.
- Un par de meses – farfulla – pero volveré para las fiestas de fin de año.
- ¿Y a dónde piensas ir? – inquiero preocupado. Pues ella nunca ha viajado sola.
- Aún no lo he decidido, pero supongo que al Oeste, tal vez Alabama, Mississipi – farfulla – quiero pintar, conocer lugares nuevos y redescubrirme a mí misma.
- Entiendo... - murmuro – espero que encuentres eso que necesitas.
- No, lo que necesito está justo frente a mí... - sostiene – pero justo ahora entiendo que no estás disponible para mí.
- Jimena yo no te quiero fuera de mi vida – sentencio – pero ya no ocupas el lugar que tenías, me disculpo porqué sé que esto debe ser muy difícil de oír para ti.
- Lo es y mucho – confiesa – pero me alegra saber que eres feliz.
Me acerco y la abrazo fuerte. Ahora sé que de verdad estamos en paz. Nunca quise batallar con ella. Me reconforta saber que es capaz de sentir eso por mi relación con Natasha. Puede que al fin haya conseguido cerrar este capítulo.
- Entonces ¿me hablarás de ella? – musita. Asiento con una sonrisa.
- Ella es Natasha Bailey, tiene catorce años y... últimamente se juega la vida por mi felicidad – confieso con cara de tonta.
- ¿Bailey? – murmura.
- Hermana de Gwen – aclaro.
- Vaya, así que una Bailey – remarca.
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Víctima Indefensa
General FictionLa vida del joven músico, Alexander Collins, da un cambio radical tras ser capturado por error por agentes de Mundo Amazonas. Esta organización secreta se dedica a dar caza a hombres que han quedado impunes tras haber sido juzgados por la ley por ha...