26. Preguntas y más preguntas

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12:45 | Jueves 12 de Septiembre de 2030

Jake coloca mis cosas en la parte trasera de su auto. Me ayuda a sentarme, más por el dolor que exudo que por caballerosidad. Se monta sobre su asiento mientras abrocha mi cinturón de seguridad. 

- Lo que una tiene que hacer para salir más temprano de Lincoln - comento fingiendo una broma.

- No tienes que hacer eso conmigo - señala Jake mientras se concentra en el camino.

- ¿A qué te refieres? - pregunto con miedo de haber sido pillada. Será posible que sepa que soy Alex, no eso es imposible.

- Pues al dolor de los golpes que te ha propinado Gray - argumenta mientras señala mi rostro sin voltear a verme. 

- Ah eso, la verdad es que si no hubiese sido por el entrenamiento de ayer, tal vez las cosas podrían haber sido de otra forma - argumento.

- Ajá - contesta en claro tono de sarcasmo.

- ¿Qué? - reclamo.

- Sinceramente no sé si alegrarme o preocuparme por tu comportamiento - farfulla.

- Pero ¿Qué mal le hago al mundo siendo como soy? - cavilo.

- Ninguno. Pero lo digo por Emma. Te has convertido en su ejemplo a seguir. Ella te admira. De hecho me sorprendió mucho cuando se sumó al grupo durante lo que pasó en la cafetería - comenta todavía incrédulo.

- Pues para serte franca nunca esperé el apoyo de tantos compañeros. Lo de Emma fue la cereza del pastel. Además de ser el freno final que necesitábamos para detener a Gray - afirmo.

- Sí, él tenía claro que no le perdonaría que tocase a mi hermana. Cuando vi la clara mayoría que formaron, decidí disuadirlo con lo único que al parecer valora - farfulla Jake.

- El equipo - respondo.

- Sí, es lo único que ha evitado que se meta en problemas más graves - responde Jake mientras ladea la cabeza.

- No sé, tal vez le falta centrarse o encontrar la motivación adecuada para ser una mejor persona. De cualquier modo me parece lamentable que las personas con poder o fuerza aprovechen estos atributos para favorecerse a expensas de otros - concluyo con algo de fastidio.

- Es un buen jugador y una pieza clave en el equipo. En el campo de juego su furia puede ser inspiradora para que el resto de nuestros compañeros se comprometa a dar lo mejor, aun a pesar de que puedan quedar lesionados - afirma.

- Aunque las lesiones en este deporte son casi el pan de cada día - deslizo con una sonrisa.

- Así es, pero tampoco implica que juegues a lo loco. El ataque siempre responde a una estrategia en la cual cada jugador tiene una tarea - sostiene.

- Lo sé, pero de igual modo me gustaría que fueran un poco más como tú, es decir que mostrasen que también pueden ser amables, protectores o compasivos - señalo esperanzada.

- Sé que es difícil, sobre todo porque las personas están acostumbradas a sacar ventaja de las oportunidades que se les presentan. Aunque me gusta lo que has conseguido con tu actitud en estos días - medita Jake.

- Te refieres a no dejarme arredrar ni presionar por nadie - digo hinchando al pecho.

- Sí, pero hay algo más... te has vuelto alguien digna de admiración, un modelo a seguir. Cuando la gente te ve se queda pensando "¿y ahora qué hará esta chica?", sé que lo hacen porque yo lo hago. Tu actitud segura e incluso desafiante es algo que inspira al resto a tratar de hacer las cosas mejor - comenta mientras me sonríe. Me encojo de hombros y le devuelvo la sonrisa.

Víctima IndefensaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora